El Siglo de Torreón
LERDO, DGO.- Los constructores de vivienda rechazaron que esta industria no haya realizado una aportación económica importante al PIB (Producto Interno Bruto) en la presente administración Federal.
Gerardo Sifuentes Guerrero, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi) negó lo dicho por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), en el sentido de que en estos tres años de Gobierno foxista su aportación fue nula, inclusive no alcanzó una centésima de punto porcentual.
Las cifras del vocero de los desarrolladores de vivienda dejaron en claro que la derrama del sector si fue importante: 90 mil millones de pesos. Durante 2003 se construyeron 503 mil viviendas en el país, obras que generaron no solamente cinco empleos por cada casa edificada, sino recursos cercanos a los 100 mil millones de pesos.
?Resulta ilógico la afirmación hecha por INEGI, ya que sus efectos se multiplican en 42 ramas de la economía nacional, se generan empleos y recursos al país?, puntualizó Gerardo Sifuentes.
Para el entrevistado sólo basta ver las cifras del sector para desmentir lo dicho por cualquier institución, por lo que no se debe dudar que el ramo de la vivienda sí es un motor de la economía del país.
Lo que se reconoció fue que el impacto negativo que tuvo el desempleo en la maquila de ropa dentro del sector, ya que en la fase de venta de la vivienda se encontraba constantemente que un buen número de derechohabientes ya había perdido su relación laboral.
Fuerte competencia
El entrevistado reconoció que en estos momentos existe un gran número de desarrolladores de vivienda, particularmente en el tipo medio.
Mientras que en 2003 no se llegaron a edificar 400 casas de este tamaño, en 2004 se contabilizan mil 400 desarrollos en La Laguna. En cuanto a la vivienda tradicional del Instituto Nacional de Fomento a la Vivienda de los Trabajadores, en la cual se paga a los constructores en 15 a 16 semanas, los constructores tuvieron que realizar una mezcla óptima en cuanto al tamaño y número de casas. Lo anterior fue producto de cambios a las reglas del juego del Instituto.
De acuerdo Gerardo Sifuentes, anteriormente el mercado que se atendía era 100 por ciento de Infonavit, particularmente en inmuebles con un valor de 200 mil pesos. Sin embargo, las circunstancias del mercado cambiaron y volvieron a voltear a la vivienda económica ?160 mil pesos hacia abajo- y manejar un mayor volumen.
Otra de las opciones aprovechadas es el tamaño medio, la cual se desarrolla bajo el esquema de apoyo Infonavit, Sociedades Financieras de Objeto Limitado y bancos.