Informa empresa egipcia sobre la entrega de cuatro rehenes en Irak.
EFE
ROMA, ITALIA.- Las dos cooperantes italianas liberadas ayer en Irak, tras tres semanas de secuestro, llegaron a Roma, donde fueron recibidas por el primer ministro, Silvio Berlusconi, y por sus familiares, en medio de escenas de júbilo.
Simona Pari y Simona Torretta aterrizaron hacia las 23:15 hora local en el aeropuerto de Ciampino, donde se dieron cita, además de Berlusconi, su vicepresidente, Gianfranco Fini, el alcalde de Roma, Walter Veltroni, y líderes de la oposición como Francesco Rutelli.
Las dos jóvenes, ambas de 29 años, saludaron a sus allegados a bordo del Falcón 20 de la Cruz Roja Internacional que las trasladó a Roma, del que luego descendieron sonrientes y aparentemente relajadas, antes de caminar hacia la terminal unidas de la mano.
Ataviadas con un vestido blanco hasta los pies, las ?dos Simonas?, como se las conoce en Italia, posaron con amabilidad para los fotógrafos y pronunciaron palabras tranquilizadoras: ?Estamos bien y nos han tratado con respeto?.
No obstante, poco después de su liberación, Simona Torretta le había dicho a su madre por teléfono que había pasado por momentos ?duros y desalentadores?, según el relato del presidente de la décima circunscripción municipal romana, Sandro Medici.
Tras comparecer brevemente ante la prensa, las dos cooperantes se dirigieron hacia un helicóptero del Arma de Carabinieri estacionado en el mismo aeropuerto de Ciampino, que les trasladó hasta la Fiscalía de Roma para prestar declaración en el sumario abierto por su secuestro.
A la llegada a Roma de las ?dos Simonas? asistió, a través de la televisión, Italia entera, donde se esperaba con ansia este momento, después de la tensión acumulada en los últimos días por las noticias contradictorias que anunciaron su muerte.
Junto a las dos italianas también fueron liberados ayer los dos colegas iraquíes capturados al mismo tiempo, Mahnaz Bassam, de la organización ?Intersos?, y el ingeniero Razad Ali Abdul.
En sus primeras declaraciones también han comentado que fueron tratados bien y que estuvieron en escondites separados desde el momento de su captura, el pasado siete de junio en la sede bagdadí de la Organización No Gubernamental para la que trabajaban, ?Un ponte per...? (?Un puente para...?).
Por otra parte, la compañía de telecomunicaciones egipcia Orascom confirmó ayer la puesta en libertad de cuatro de los seis empleados que habían sido secuestrados la semana pasada en Irak.
En un comunicado enviado a diversos medios de prensa, la compañía subrayó, además, que prosiguen las negociaciones con los intermediarios para conseguir la liberación de los otros dos trabajadores.
La empresa ha hecho pública la liberación horas después de que el diario progubernamental egipcio Al Ahram anunciara en su edición matutina que tres de los ingenieros secuestrados habían sido puestos en libertad.
En la madrugada del lunes, la agencia oficial de noticias local MENA había dado la noticia de la liberación del primero de ellos, un ingeniero identificado como Alaa Maqar.
Según fuentes de la compañía citadas por el rotativo, los cuatro técnicos fueron puestos en libertad por sus captores poco después de la medianoche y trasladados a su residencia en Bagdad, en medio de estrictas medidas de seguridad.
Al Ahram también revelaba que otros 24 técnicos e ingenieros egipcios que trabajan en la instalación de una red de teléfonos móviles para la empresa Iraqna (Nuestro Irak), asociada con Orascom, regresarán a Egipto en los próximos días.
Los tres liberados son Amir Daud, Tarek Abdelatif y Medhat Rezq, también capturados el pasado miércoles, junto a otros cuatro compañeros iraquíes, en la zona de Al Qaim, al oeste de Bagdad.
Los otros dos ingenieros egipcios de Orascom todavía en poder de sus captores fueron secuestrados el pasado jueves de su domicilio en Bagdad.
Expresa el Papa su alegría
El Papa Juan Pablo II expresó ayer ?gran alegría? al conocer la liberación de Simona Pari y Simona Torretta, las dos cooperantes italianas de 29 años que fueron secuestradas en Bagdad el siete de septiembre, informó el portavoz vaticano, Joaquín Navarro Valls.
?El Papa ha conocido con gran alegría la noticia de la liberación de las dos voluntarias italianas. También ha pensado en sus familias y en todas las personas de buena voluntad y da gracias a Dios por este gesto de humanidad?, manifestó Navarro Valls.
La Iglesia italiana también expresó su alegría por la liberación. El obispo Giuseppe Bettori, secretario general de la Conferencia Episcopal (CEI), dijo que la liberación de las dos italianas y de los dos rehenes iraquíes ?nos llena de alegría y es una gran señal de esperanza tras días de espera y angustias?.
?Las plegarias y las muchas iniciativas puestas en marcha en estos días a todos los niveles han permitido llegar a este importante objetivo. Nuestro pensamiento va también para todas aquellas personas que aún siguen secuestradas, con el deseo de que se multipliquen estos gestos de respeto por la vida humana, que contribuyen de manera decisiva a la construcción de la paz?, afirmó Bettori.