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México, DF.- En medio de aplausos, anécdotas y sorpresas, el cantante argentino Diego Torres ofreció la víspera un emotivo concierto, en el que la tristeza de la pérdida de su madre y la felicidad de la aceptación de su público se conjugaron en una velada inolvidable.
Al filo de las 21:00 horas las luces del recinto se prendieron el intérprete se posesionó del escenario, como parte de la gira promocional de su disco Diego Torres MTV, Unplugged, en el Salón 21 de esta ciudad, con el tema Dónde Van de su última producción musical, en medio de una fuerte ovación del público.
?Estoy muy contento de estar en este país, hace muchos años que no venía para acá y era una cuenta pendiente que tenía con México?, decía el artista mientras sus admiradores le pedían a gritos temas como Deja de Pedir Perdón. La euforia de los miles de seguidores que se dieron cita en este lugar se desbordó al oír Sé que ya no Volverás y Cantar Hasta Morir, primer sencillo del Disco Diego Torres MTV Unplugged, que ya se escucha en la radio.
No me Digas y Penélope formaron parte del repertorio con el que el cantante hizo las delicias del público en esta velada. ?Te queremos Diego, te queremos?, resonaba en el recinto, en tanto, Torres interpretaba Déjame Entrar y Alba, que fueron coreadas a todo pulmón por la concurrencia.
Algunos de sus admiradores se aproximaron al escenario a entregarle diversos obsequios, entre ellos una camiseta oficial de la Selección Mexicana de Futbol, que de inmediato se colocó el cantante cómo símbolo de agradecimiento. ?El público mexicano siempre ha sido el mejor?, dijo.
El concierto continuó con los más recientes temas de su repertorio, entre los que se encuentran Tratar de Estar Mejor y Color Esperanza, con los que exaltó el ánimo del auditorio que nunca dejó de aplaudirle.
La sorpresa de la noche fue el cantante mexicano Erick Rubín, quien apareció en el escenario para cantar a dueto con Diego Torres No lo Soñé, melodía a la que se unieron las voces de la muchedumbre.
Luego, el público entusiasta acompañó con sus palmas al artista en las canciones Nada Más y La Última Noche. ?Ole, ole, ole, ole, Diego, Diego?, se escuchaba en cada rincón del Salón 21, mientras que el artista contaba una curiosa anécdota que arrebató una larga ovación de los asistentes.