Agencias
MÉXICO, DF.- México muestra una panorama económico positivo, porque crecerá 3.5 por ciento este año, pero esa tasa es insuficiente para igualar el desarrollo que reportan países como Japón, Estados Unidos y la Unión Europea, consideraron especialistas de la OCDE.
Para cubrir los requerimientos de empleo y desarrollo social, México necesita crecer a un ritmo de seis por ciento, nivel con el que deberían pasar aún entre 30 y 50 años para semejar el promedio de los países desarrollados referidos, de acuerdo con Benedicte Larre.
La economista en jefe de los Estudios Económicos de México de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), dijo que son positivas las perspectivas para la recuperación de la economía mexicana, pero insuficientes para garantizar un crecimiento sólido y sostenible en el largo plazo.
En videoconferencia, transmitida desde París, aclaró que concretar las reformas estructurales pendientes, como la fiscal y la energética, favorecerían un avance rápido y sostenido.
Reconoció que los precios elevados del petróleo fortalecerán las finanzas del gobierno federal, lo cual podría reactivar el gasto social y en infraestructura y por ende la economía nacional.
Aclaró, sin embargo, que las altas cotizaciones también pueden incidir negativamente en el crecimiento económico mundial, lo cual repercutiría en México.
El jefe de Estudios Económicos II de la OCDE, Nick Vanston coincidió con Benedicte Larre en las perspectivas sobre la elevada cotización del crudo en el ámbito internacional, aunque rechazó un "choque petrolero" como el de la década de los 70, cuando el precio del hidrocarburo se triplicó.
Estimó que un nivel preocupante para las proyecciones económicas sería entre 45 y 50 dólares por barril para los crudos marcadores internacionales, y de 37 dólares para la mezcla mexicana de petróleo.
El especialista también habló del empleo en México, para el que previó un incremento de cuatro por ciento durante los próximos dos años, lo cual significaría que parte de las plazas formales serían ocupadas por personas que ahora laboran en la informalidad.
Aún así, aclaró esa tasa sería insuficiente para cubrir la demanda de empleo que existe, y sólo se lograría crecer a tasas de 3.5 por ciento este año y 4.2 por ciento en 2005, mientras que lo óptimo serían tasas promedio sostenidas de 5.6 a seis por ciento.
Del incremento que reportan las tasas de interés y el tipo del cambio, lo cual podría incidir negativamente en la inflación, el funcionario de la OCDE aseguró que la volatilidad que muestran no son motivo de preocupación.
Por el contrario, dijo, el aumento en las tasas de rendimiento en Estados Unidos son una señal de la reactivación económica vigorosa de aquella economía, lo cual favorece a México.
Confió que el Banco de México (Banxico) tomará las medidas necesarias para moderar la turbulencia en el mercado, a fin de cumplir con la meta de inflación prevista.
No obstante, Benedicte Larre insistió en la necesidad de concretar las reformas estructurales pendientes, principalmente la fiscal y la eléctrica para que México crezca rápido y de manera sostenida. De lo contrario, dijo, se haría a tasas de 3.5 y 4.2 por ciento, lo cual sería insuficiente.
Favorable perspectiva global
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) revisó al alza sus pronósticos de crecimiento en las 30 principales economías mundiales y aseveró que la recuperación económica global es "fuerte y sostenible".
En su informe semestral de perspectivas económicas mundiales, la OCDE pronosticó que la media aritmética del crecimiento de sus 30 países miembros será este año de un 3.4 por ciento y de un 3.3 por ciento en 2005.
Señaló que la economía estadounidense seguirá siendo la que tire de la recuperación económica mundial, ya que crecerá un 4.7 por ciento en 2004 y un 3.7 por ciento en 2005. La zona euro crecerá pero "débilmente", en particular Alemania e Italia cuyo Producto Interno Bruto (PIB) no superará un crecimiento del 0.9 por ciento en 2005, debido a "la escasa confianza de los hogares que anima el ahorro y deprime la demanda".
La OCDE revisó por ello en dos décimas a la baja la previsión de crecimiento de la economía de los 12 países con el euro como moneda común y pidió al Banco Central Europeo (BCE) reducir en medio punto las tasas de interés.
Según la OCDE, el crecimiento medio de la economía de la eurozona será de un 1.6 por ciento este año, dos décimas por debajo de lo previsto hace unos meses, y un 2.4 por ciento en 2005, una décima menos.
Los autores del reporte insistieron en el "dinamismo de la actividad en Asia y sobre todo en China", que "refleja la recuperación mundial. Pero más todavía el impacto de la liberalización de los intercambios y de las inversiones en el contexto de la adhesión de este país a la Organización Mundial del Comercio (OMC)".