Organizaciones mantienen que las principales asociaciones médicas de EU han rechazado el argumento de que la marihuana tiene fines terapéuticos.
Washington, (Notimex).- La Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos escuchó hoy los argumentos a favor y en contra en un caso que podría determinar el futuro del consumo de la marihuana con fines terapéuticos, lo que podría afectar a cientos de personas.
Los magistrados, que sesionaron sin la presencia del presidente de la corte William Rehnquist -recién operado de un cáncer en la tiroides-, escucharon la demanda presentada por Angel Raich, una mujer de California, contra el procurador general John Ashcroft.
Raich, de 39 años y madre de tres hijos, padece un tumor cerebral que paraliza su cuerpo, por lo cual debe inhalar por prescripción medica marihuana cada dos horas o de lo contrario su debilidad le impide caminar, según su propio testimonio.
"Si (los magistrados) fallan en mi contra, estarán dándome una sentencia de muerte", aseguró Raich.
Aunque California y otros nueve estados permiten el consumo de la droga con fines terapéuticos, siempre que exista prescripción médica, el gobierno federal ha decomisado las plantas cultivadas en casas como la de Raich y la de otra demandante, Diane Monson.
Su abogado, Randy Barnett, sostuvo que el gobierno federal no tiene injerencia porque excede la autoridad que la Constitución confiere al Ejecutivo respecto a la regulación del comercio entre estados.
"La existencia de leyes estatales protege a la gente, en este caso a los consumidores de marihuana si cumplen con la ley estatal", sostuvo.
Monson, quien padece dolor de espalda crónico, por ejemplo, podría ser arrestada si viaja con la marihuana más allá de California. La mujer señaló que de hecho porta la droga cuando sale del estado, aún bajo el riesgo de ser aprehendida.
Durante la sesión, el magistrado Stephen Breyer dijo a los demandantes que debían primero presentar su queja ante los reguladores, la Administración de Alimentos y Medicinas(FDA), antes que al máximo tribunal del país.
En rueda de prensa posterior, Monson se declaró sorprendida del comentario de Breyer, toda vez que varias personas han llevado sus casos a la FDA sin resultados satisfactorios.
La demanda de Raich y Monson es apoyada por varios grupos conservadores, no porque apoyen el uso de la marihuana, sino porque creen que el Gobierno Federal no debe ejercer jurisdicción sobre legislaciones aprobadas por los estados.
En 2003, la Corte de Apelaciones del Noveno Distrito, en San Francisco, falló a favor de Monson, por lo que el caso llegó a la Corte Suprema de Justicia, que tendrá la última palabra.
En 1942, el tribunal decidió en un caso similar que el gobierno tenía jurisdicción sobre los estados en el caso de un granjero que cultivaba marihuana, ya que la corte sostuvo que su producción afectaba el precio del producto a nivel federal.
Fuera del máximo tribunal, una veintena de manifestantes desafiaron el frío con pancartas a favor del uso médico de la marihuana. "Dejen de arrestar a enfermos", rezaba la leyenda en un cartelón rojo.
En contraparte, organizaciones como la Fundación para una América Libre de Drogas mantienen que las principales asociaciones médicas de Estados Unidos han rechazado el argumento de que la marihuana tiene fines terapéuticos.
"La marihuana no sólo es dañina, es adictiva y potencialmente mortal", sostuvo el grupo, el cual agregó que "también ha sido demostrado científicamente que puede conducir al uso de drogas más duras".
Los grupos sostienen que, de darse un fallo favorable para los demandantes, sería un paso adelante hacia la eventual legalización del consumo de drogas en Estados Unidos.
Se espera que la Suprema Corte de Justicia emita su decisión final en julio de 2005.