La Dirección Municipal de Cultura no cumple con su objetivo de editar un libro por mes; sólo llega a cinco
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- No se cumplió la meta. Alberto González Domene había prometido la publicación de un libro por mes y durante 2003, la Dirección Municipal de Cultura sólo presentó cinco.
“El primer año no pudimos lograr este objetivo, solamente editamos cinco y promovimos dos más, pero este año sigue en pie la meta de un libro mensual y ya tenemos el primero”, asegura el funcionario.
Así inicia 2004, con una nueva promesa que, especialmente, la comunidad artística de la región espera se cumpla, porque hasta el momento ha escuchado mucho y visto poco.
Saúl Rosales Carrillo, escritor y miembro del Consejo Editorial de la pasada administración, califica al actual programa de publicaciones del Ayuntamiento como “paupérrimo”.
“Sabemos que salieron cinco libros el año pasado, vamos a suponer que sea el promedio que pudiera llevarse el resto de la administración, el cual sería de un libro por mes a partir del segundo semestre; esperemos a ver los libros que salgan en los dos años siguientes, yo les concedería el beneficio de la duda”.
El escritor es tajante al señalar lo disparejo de este proyecto editorial. “La administración anterior se propuso publicar libros de literatura, los de historia se canalizaban hacia el archivo municipal; pero, actualmente la Dirección Municipal de Cultura está publicando de todo: ha editado un libro de corridos sobre Pancho Villa; uno más o menos de literatura, que es el de la Sociedad de Escritoras de La Laguna; uno de poesía de Carlos Reyes; dos libros de historia, uno de Leticia González y uno de Gildardo Contreras. Yo creo que podría restringir su campo de acción editorial y no asumir lo de historia, para que haya otras instancias que puedan hacerlo y que esta dependencia publique solamente lo que convencionalmente se asocia a la palabra cultura”.
Esa es la opinión personal de quien además de tener en su haber numerosas publicaciones, fue nombrado a finales del año pasado miembro de la Academia Mexicana de La Lengua.
Rosales Carrillo seleccionaba, junto a Magda Madero y Yolanda Natera, dos escritoras de reconocida trayectoria también, las obras que habrían de editarse durante la administración pasada. Y llegaron a las 25 publicaciones literarias, dos reediciones, un libro de fotografías y uno más sobre la historia de los murales de la Presidencia Municipal, un promedio aproximado de un libro por mes.
“Fue una labor editorial intensa, productiva y, sobretodo, de mucha calidad; yo creo que entre los libros que publicamos podríamos arrepentirnos de haberlo hecho respecto a dos, pero el resto fue de mucha calidad”, asegura.
Cuestión de buen juicio
En la opinión de Saúl, esta política fue “muy positiva”, porque además de ofrecer cantidad, se cuidaba sobremanera la calidad de los textos. Él se encargaba también de editarlos.
“En los de narrativa se buscaba que las historias fueran contadas con limpieza sintáctica, con una técnica adecuada y sólida, que el manejo de la lengua fuera efectivamente literario y no indebidamente coloquial”, explica.
Mientras que en los de poesía, se vigilaba que el texto “transpirara honestidad de sentimientos, valores más inmediatos y palpables, asepsia sintáctica, capacidad para manejar las palabras con su calidad semántica estricta y también con su reenergización poética”.
En ambos géneros, detalla el escritor, se pretendía publicar trabajos bien estructurados, que comparados con la obra de grandes escritores, siguieran esa misma línea.
En este juicio versaba la mayoría de las obras aspirantes a editarse. Hubo muchas rechazadas, porque “nos propusimos que si se iba a invertir el dinero del erario público en obra literaria, ésta tendría que ser de la mejor calidad”.
En el mismo sentido, Luis Azpe Pico, miembro del actual Consejo Editorial, señala que la prioridad del programa que encabeza es publicar la obra de los escritores laguneros con poca oportunidad de dar a conocer su obra.
“Tenemos escritores de mucho prestigio, pero ellos ya tienen una escuela y un nombre y creo que una Dirección Municipal de Cultura tiene que darles oportunidad a los autores noveles, con ciertas posibilidades de seguir adelante”.
Hasta el momento, Azpe Pico es el único miembro confirmado del Consejo Editorial. Según informó, se está en pláticas con Asunción del Río, a quien todavía no conoce y con quien pretende unificar criterios si es que acepta la función”.
“Hay quienes le echan ganas, pero no se trata sólo de narrar por narrar, daremos estímulos siempre y cuando haya calidad de por medio”, enfatiza.
Luis Azpe Pico inicia funciones en el consejo a partir de 2004, aunque ya el año pasado dio asesoría en algunas publicaciones. Poco se sabe de las personas que se encargaron de seleccionar las cinco publicaciones de 2003.
Afirma que su preocupación se centra especialmente en dos tipos de personas: Los jóvenes y los de la tercera edad, los primeros porque empiezan una carrera, los segundos porque terminan y en su opinión “hay que reconocerlos”.
Al igual que Alberto González Domene, el también escritor se compromete a publicar un libro por mes a partir de este año y hasta que concluya la administración municipal. Pero, advierte: “Prefiero publicar un libro aunque sea delgado, pero de buena calidad y no dos de mala calidad”.
Por lo pronto, el de enero ya está listo: Las Lenguas Dementes, poemario de 14 autores laguneros. Al parecer, el de febrero será la segunda parte de la antología de la Sociedad de Escritoras Laguneras. Y en revisión está Recuerdos del Agua Grande, de Chayito Martínez.
Preguntas en el aire
De los 25 libros publicados por la pasada administración, se distribuyeron gratuitamente cerca de mil ejemplares, dependiendo del número de páginas de cada obra. Éstas se repartían gratuitamente durante la presentación oficial y luego en bibliotecas y en las mismas oficinas de la Dirección Municipal de Cultura.
Un rumor empezó a sonar desde principios de 2003: Que los libros editados por el Municipio se vendían, tanto a los mismos autores como al público en general.
“Debe escandalizar que una dependencia municipal esté publicando libros con nuestros impuestos y luego nos los venda, yo creo que es grave que una oficina pública se ponga a lucrar con el producto de los autores laguneros”, opina Saúl Rosales.
Según apunta, normalmente se debe entregar el diez por ciento del presupuesto asignado para cada publicación al autor, el 90 por ciento restante se debe entregar al pueblo a través de los libros editados, por eso deben ser gratuitos.
En el tema del recurso económico, surgen otras dudas. Si la meta era publicar un libro por mes, ¿dónde está el monto que se asignaría a cada obra? Una respuesta que queda en el aire.
Independientemente de funcionarios y partidos, el programa editorial de la anterior Dirección Municipal de Cultura sentó un precedente y es la prueba de que los laguneros son capaces de producir obras del espíritu. Y más allá de eso, demostró que si una administración pública se lo propone, puede darle salida y viabilidad al producto en el que se condensa gran parte del sentimiento local.
“Esta abundante y cualitativamente superior obra editorial de la administración anterior debería ser un estímulo, un punto de comparación y de partida para llevar a cabo una obra superior. Habrá que esperar los resultados”, concluye Saúl Rosales.
El primero del año…
Las Lenguas Dementes es la primera publicación de la Dirección Municipal de Cultura para este 2004. Se trata de una compilación de textos de 14 poetas laguneros, a cargo de Daniel Maldonado Sánchez.
El novel escritor comenta que el proceso de edición fue sencillo. Llevó la obra hasta las oficinas de esta dependencia y esperó respuesta del Consejo Editorial, la cual fue positiva y a cabo de casi cuatro meses la publicación ya está lista.
El libro en el que participan Édgar Valencia, Carlos Velásquez, Bismarck Soriano, Óscar Seyler, Jesús Rodríguez, Arturo Robles Quiroz, Rodrigo Jurado, Roberto Guzmán Torres, José Cháirez, Alejandro Cárdenas López, César Cano, Alejandro Misael Alvarado, Alfonso Alexandre y el mismo Daniel Maldonado, será presentado el próximo 22 de enero, a las 20:30 horas, en la Biblioteca Pública Municipal José García de Letona.
Al parecer es un buen inicio con la obra de estos jóvenes pero ya destacados escritores laguneros que, de continuar así, promete más lecturas de calidad para la comunidad de esta región.
Punto de partida
Algunos de los títulos publicados dentro de la colección MM de la Dirección Municipal de Cultura 2000-2002:
-La Máquina de Coser: Cuentos de Rosario Ramos Salas.
-Una Larga Espera: Cuentos de Alberto Rodríguez Román.
-Condominio de Poetas: Poemas de 20 autores compilados por Saúl Rosales.
-Árbol sin Hojas: Poesía de Luis Azpe Pico.
-Estallará la Luz: Poesía de Pablo Arredondo.
-Basilisa, mi Tía Difunta y Otros Cuentos: Cuentos de Lilia Rosa.
-La Nave de los Sigilos: Ensayos de Irving Ramírez.
-El Ocaso de los Días Difíciles: Novela de José Luis Herrera Arce.
-Enseñanza Superior: Cuentos de Miguel Báez Durán, José Luis Herrera Arce, Angélica López Gándara, Magda Madero, Jaime Muñoz Vargas, Rosario Ramos Salas, Vicente Rodríguez Aguirre y Saúl Rosales Carrillo.
-Un Comal Lleno de Voces: Ensayo de Miguel Báez Durán.
-Desafío de Sombras: Cuentos de Magda Madero.
-Los Otros Males: Poesía de Daniel Maldonado Sánchez.
-Mazurca para un Suicida: Poemario de Lidia Acevedo.
-Vainilla, Bronce y Morir: Novela de Lilia Rosa.
-Papel Revolución: Narrativa breve de Salvador Castañeda.
-Fundación del Futuro: Poesía de José Lupe González.
-Sueños de La Laguna: Ensayos de 12 autores, compilados por Magda Madero y Saúl Rosales.
-Los Días en el Jardín: Poesía de Miguel Ángel Morales Aguilar.
-Donde Oficia la Sangre: Poesía de Carlos Reyes Ávila.
-Floración del Sueño: Poesía de Saúl Rosales.
-Huellas de La Laguna: Ensayos de Saúl Rosales.
-Orfebrería de Signos: Cuentos de varios autores.
-Apuntes para una Tarde con Lluvia: Ensayos de Edgar Valencia.
-Donde el Mar ha Tatuado Soles: Poesía de Pablo Arredondo.
-Clausurado: Fotografía, diseño y compilación de textos de Héctor Moreno Robles.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón
Apenas
Durante 2003, la Dirección Municipal de Cultura editó cinco libros dentro de la colección Centenario:
-Leonardo Zuloaga, Fundador del Torreón: Gildardo Contreras Palacios.
-1918: La Epidemia de la Influenza Española en la Comarca Lagunera: Crónica de Leticia González Arratia.
-Fotos y Corridos de Pancho Villa: Compilación de Manuel Terán Lira.
-Aprendiz de Volador: Poemas para niños de Carlos Reyes Ávila.
-Sinfonía a 12 Voces: Ensayos y Cuentos de Angélica López Gándara, Dolores Díaz Rivera, Genoveva García Montoya, Gloria Barrer, Leticia Valdés Barba, Magdalena Chacón Cruz, María de los Ángeles Valdés Barba, María Guadalupe Castro, Oralia Esparza, Querube Lizárraga Trujillo, Rosa Gámez Reyes Retana y Rosario Ramos Salas (Sociedad de Escritoras de La Laguna A. C).
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón
