Buenos Aires, (EFE).- La Fundación Aerolíneas Argentinas puso en manos del "pueblo argentino", representado por el Parlamento, los tres velos sudarios que cubrieron los restos mortales de Eva Perón, reverenciada como la "abanderada de los humildes".
La mortaja, que había sido adquirida en marzo pasado por el presidente de la aerolínea, el español Antonio Mata, en una subasta de Christie's en Roma, por un pago de 130 mil euros, será exhibida desde ahora en el Salón Azul del Palacio del Congreso argentino.
"Recuperar este patrimonio histórico era una obligación que teníamos con el pueblo argentino, como agradecimiento de Aerolíneas Argentinas por tantos años de fidelidad con su actividad, tras 54 años de su fundación por parte del general (Juan Domingo) Perón", dijo a EFE el empresario español.
El traspaso de los velos que envolvieron el cuerpo de Evita entre 1971 y 1974 se realizó mediante la firma de una acta que condiciona la donación a que el Parlamente no enajene el bien, lo mantenga en "perfecto estado de conservación" y lo exhiba al público "sin fines políticos ni partidarios".
El acta fue firmada por Mata, en representación de la Fundación Aerolíneas Argentinas, por el vicepresidente argentino y titular del Senado, Daniel Scioli, y por el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Camaño.
"Esta donación es un hecho de gran trascendencia para todos los argentinos. Sólo se puede construir el futuro desde el respeto al pasado", dijo Scioli, tras ensalzar la figura de Eva Duarte de Perón.
El vicepresidente felicitó y agradeció a Aerolíneas Argentinas, integrante del grupo español Marsans, "por ser fiel a su historia al servicio de los argentinos" y sostuvo que "esta nueva manifestación al pueblo argentino es una demostración de que vuela alto".
Los sudarios de seda, con los colores de la bandera argentina, celeste y blanco, fueron colocados en un cofre de vidrio anti-balas, cuyas llaves fueron entregadas simbólicamente al titular de la Cámara de Diputados.
Eva Perón murió de cáncer en julio de 1952, tras renunciar a acompañar a su esposo en la formula presidencial para su reelección, y sus restos, trasladados bajo otro nombre, aparecieron en Milán (Italia) en 1957.
El general Perón, quien fuera tres veces presidente de Argentina, pidió en 1971 la restitución del cuerpo de su segunda esposa, al que envolvió en las sábanas que mandó a confeccionar al Convento de Clausura de la Merced de Madrid.
Los restos de Evita fueron traídos a Argentina en 1974, pero los velos sudarios quedaron en Madrid.
La mortaja fue presentada a subasta en Roma por la Fundación por la Paz y la Amistad de los Pueblos, creada en 1986 por Antonio Mario Rotundo, antiguo secretario de Perón y de su viuda, María Estela Martínez de Perón.
