Agosto es tradicionalmente el mes de vacaciones en Grecia, cuando la gente se va en masa a la costa.
19 DE AGOSTO DE 2004
ATENAS (AP) .- Los atenienses no están yendo a los estadios ni están agravando el congestionado tráfico de la ciudad ni se están yendo a las tradicionales islas de vacaciones.
Pareciera como si muchos simplemente se hubiesen desvanecido.
Agosto es tradicionalmente el mes de vacaciones en Grecia, cuando la gente se va en masa a la costa. Los organizadores de los Juegos Olímpicos contaban con eso para aliviar el trafico, y en un sentido les dio resultado.
Pero al parecer fue demasiado, a juzgar por los estadios casi vacíos de algunas competencias.
En Atenas hay alrededor de dos millones de automóviles particulares a los que se permite usar sólo un carril en las principales carreteras y avenidas, mientras los dos restantes son reservados para los vehículos de los juegos y del transporte público.
Los barrios residenciales, donde normalmente cuesta encontrar un lugar para estacionar, están casi vacíos estos días.
"La vida está muy difícil", dijo el taxista Anastasios Dagres, quejándose por la falta de clientes en la capital de 5 millones de habitantes. "Yo estoy a punto de retirarme".
Lo curioso es que a la ausencia de gente en Atenas, se agrega que las islas del mar Egeo, normalmente llenas en esta época, parecen también vacías.
La pregunta, entonces, es ¿a dónde se fue la gente?.
"A casas particulares de vacaciones, a lugares cercanos a los que pueden ir y volver", asegura Yiannis Evangelou, presidente de la Asociación de Agentes de Viajes. "Están tomando vacaciones breves, sólo unos pocos días, no las dos vacaciones que se tomaban antes".
Algunos residentes explican que razones financieras han cambiado las características de la época de vacaciones, especialmente por las alzas bruscas alzas de muchos precios a raíz de los juegos. Las alzas también han desalentado a visitantes del exterior.
"Tenemos una baja de 12 por ciento en los vuelos contratados que llegan", dijo Spyros Galiatsatos, presidente de la asociación de hoteleros de las islas de Kefalonia e Itaki.
Grecia recibe anualmente unos 14 millones de turistas pero este año ha habido una fuerte baja, que los expertos atribuyen a temores de posibles actos de terrorismo y a las dificultades para la compra de boletos olímpicos en el exterior.