EL SIGLO DE TORREÓN
En esta ocasión, ganaron las mujeres y es porque de los tres recién nacidos, dos de ellos fueron niñas.
En un hospital ubicado en la avenida Allende se presenció una dulce escena. Las felices mamás se encontraban con sus bebés en brazos y acompañadas por los dichosos papás; además, algunos de sus familiares y amistades compartían con ellas la alegría del nacimiento de sus lindos hijos.
Por educación, empezamos con las mujeres. La primera recién nacida es la preciosa Sofía Gilio Alatorre, sus papás son Marcela y Gustavo Gilio, quienes estaban felices por el nacimiento de su cuarto hijo. Nos platicaron que la pequeña nació el 15 de marzo, pesó 2.600 Kg. y midió 49 centímetros.
Durante el embarazo, Marcela dijo haberse sentido muy antojada por lo que, casi a diario, compraba un helado. En la sala de visitas encontramos a los orgullosos tíos de Sofía: José Francisco Alatorre, Fernando Izaguirre y Alejandra de Izaguirre.
La segunda bebé es la tierna Diana Valeria López Praga, quien de igual forma nació el 15 de marzo, la única diferencia es que ella pesó un poquito más: 3.550 Kg. y midió 52 centímetros. Los papás son Adriana y Reynaldo Praga, quienes recibieron a su segunda heredera, el primero de ellos es Alan Daniel que tan sólo tiene tres años de edad y está -según comentaron- muy contento de tener una hermanita, ?para nada está celoso, al contrario, sólo quiere estar con ella?.
El pequeño Bernardito Barrios Sobrino llegó a ser un digno representante de los hombres, al no haber permitido dejar el marcador en ceros respecto al número de nacimientos del día 15.
Es el segundo bebé del matrimonio formado por Bernardo y María Esther Barrios, quienes dichosos se encontraban de tener ya la ?parejita?, su primera hija se llama Marité y tiene dos añitos.
Éstos fueron algunos de los alumbramientos del día 15 de marzo, ¿cuántos más habrán sido en todo el mundo? Los que hayan nacido, seguramente llegaron a convertir a sus papás en los más dichosos y felices del planeta. Cada uno de ellos es especial y llegó a un nuevo hogar, en el que durante nueve meses fue muy esperado y ahora lo recibe cálidamente.
