Autoridades analizan varias líneas de invstigación
Una muerte violenta encontraron cuatro personas a bordo de su camioneta luego de que fueron emboscadas cuando circulaban por un camino vecinal en los límites de Durango y Sinaloa. De momento las autoridades de ambos estados buscan a los homicidas, que al parecer se refugian en territorio duranguense.
De acuerdo con el informe que rindieron los agentes de la Policía Ministerial a la Procuraduría de Justicia, que acudieron al lugar de los hechos, fue por la tarde del lunes cuando se perpetró el crimen, pero fue hasta mañana del martes cuando varios campesinos hicieron el descubrimiento y dieron aviso de una camioneta Ford, tipo pick-up, de color rojo, de reciente modelo, en cuyo interior estaban cuatro cadáveres del sexo masculino, mismos que presentaba cada uno mínimo tres impactos de arma de fuego de alto calibre.
La unidad, que también presentaba disparos en ambos lados y el parabrisas, se ubicaba en un paraje lejano de la sierra, a la mitad de un camino de terracería que comunica a los ejido El Coyote y 2 de Abril, el primero perteneciente a Durango y el segundo a Sinaloa.
Una vez ahí, agentes de la Ministerial del vecino estado y elementos de Periciales realizaron el levantamiento de los cadáveres que luego de practicarles la respectiva necropsia de ley los entregaron a sus familiares.
Ellos son Antonio, de 36 años; Valente, de 34; y Justino, de 31, todos de apellido Quiñones, así como un cuarto al parecer amigo, de nombre Alejandro Carlos Cordero, de 35 años de edad, con domicilio en la colonia Guadalupe Victoria de la ciudad de Culiacán, Sinaloa.
De momento se analizan varias líneas de investigación, como el ajuste de cuentas por rencillas, incluso por razones territoriales del narcotráfico, que de ellas ninguna se descarta hasta no dar con los presuntos homicidas que son buscados por agentes de ambas entidades en sus respectivos territorios.
