EL SIGLO DE TORREÓN
/ AGENCIAS
DE LA REDACCIÓN.- Los secuestradores iraquíes de cuatro ciudadanos italianos han ejecutado a uno de ellos y amenazan con matar al resto en las próximas horas si no se cumplen sus exigencias, informó el canal de televisión por satélite qatarí Al Yazzera.
De confirmarse el hecho, éste sería el primer asesinato de un secuestrado desde que se iniciara la “crisis de los rehenes” en Irak, hace dos semanas.
La cadena explicó que los secuestradores, que se identificaron con las “Kataeb al Ajdar” (Milicias Verdes), enviaron una cinta de video con la ejecución del italiano secuestrado que Al Yazzera ha decidido no emitir por respeto a las familias.
“Lo ejecutamos tras escuchar el reciente discurso del primer ministro, Silvio Berlusconi, en el que insistía que la retirada de las tropas italianas de Irak es una condición innegociable”, aseguraron los secuestradores en un comunicado que acompañaba a la cinta.
El grupo terrorista, desconocido hasta el momento, reiteró sus exigencias originales para liberar a los otros tres ciudadanos, “o de lo contrario nos veremos obligados a matarlos uno tras otro”.
Al Yazzera describió las imágenes del video que acompañaban al comunicado de “horribles”. La noticia del secuestro de los cuatro italianos salió a la luz el pasado martes y fue anunciada asimismo en un video remitido a la cadena árabe.
En la cinta, los milicianos, con el rostro cubierto y armados con fusiles, exigieron que Berlusconi se disculpase por haber insultado al Islam en uno de sus discursos de hace meses, un calendario para la retirada de las tropas italianas, la liberación de los religiosos apresados en Irak y negociar de forma directa.
La última exigencia sólo se llevaría a cabo si el Gobierno de Berlusconi aceptaba las otras tres.
Al menos 54 extranjeros han sido capturados por insurgentes iraquíes en las dos últimas semanas, entre ellos tres ciudadanos japoneses, también amenazados de muerte, de los que no se tienen noticias.
Por su parte, el ministro italiano de Exteriores, Franco Frattini, afirmó que su Gobierno tiene “noticia solvente” de que se ha producido una ejecución en Irak, pero que aún no han podido confirmar que se trate de un rehén italiano, como informó el canal por satélite qatarí Al Yazzera.
Mientras tanto el periodista francés Alexandre Jordanov, -el primero de esta nacionalidad en ser raptado- fue puesto en libertad ayer tras cuatro días en cautiverio.
Preparan retirada
La inseguridad que reina en Irak obligó ayer a varios países a acelerar los preparativos para sacar a sus ciudadanos del país árabe mientras que otros, fieles aliados de Washington como Filipinas, consideraba retirar a sus trabajadores.
El Ministerio ruso de Situaciones de Emergencia ha preparado tres vuelos para hoy jueves y otros cuatro para mañana viernes con el fin de permitir a las 816 personas que trabajan para empresas rusas que regresen a Moscú, si así lo desean.
También el Gobierno noruego a través de su primer ministro, Kjell Magne Bondevik, confirmó que los 150 soldados que Noruega mantiene en Basora, se retirarán de Irak el 30 de junio, fecha en la que finaliza su misión y no serán reemplazados.
Bondevik justificó su decisión por la situación de inestabilidad que vive la nación árabe y por la necesidad de priorizar las misiones noruegas en Afganistán, los Balcanes y África, aunque añadió que su país seguiría presente a través de las organizaciones humanitarias.
Mientras tanto, Japón y Corea del Sur estudian la posibilidad de evacuar a los civiles de sus respectivos países en Irak, informaron ayer fuentes oficiales.
El Ministerio de Asuntos Exteriores nipón advirtió a sus ciudadanos que abandonen la nación árabe por temor a que se incrementen allí los secuestros de personal extranjero.
En ese sentido, el viceministro Yukio Takeuchi admitió que la capacidad de Japón para proteger a sus ciudadanos en ese país es limitada, por lo que apeló a “la responsabilidad” de cada persona.
La preocupación por el creciente grado de inseguridad y violencia se extendió a Corea del Sur, donde el Gobierno también prevé evacuar a los residentes sudcoreanos en ese país árabe.
La fuerza de Al Sadr
Resulta difícil saber hasta dónde va a llegar el clérigo shiita Muqtada Al Sadr o su milicia, el Ejército del Mahdi. “Son impredecibles, ahí radica su fuerza y su peligro”, explica el documentalista francés Raphael Pelseny que desde hace varios meses trabaja sobre los shiies de Irak. De momento, Muqtada ha querido poner el balón en el tejado de la autoridad religiosa shii.
Un portavoz de Muqtada anunció que el religioso había renunciado a algunas de sus exigencias y se puso a las órdenes de la máxima autoridad religiosa shii.
“El jeque Muqtada ha hecho positivas propuestas para acabar con la crisis. Es consciente de que un enfrentamiento armado no interesa a ninguna de las partes”, dijo Abdelkarim al Anzi, quien se presentó como enviado del religioso a Bagdad.
El portavoz del clérigo, Qais al Jazali, puntualizó que Muqtada ha renunciado a las condiciones que imponía y se ha puesto a las órdenes de las máximas autoridades shiies.
Horas antes el ministro iraní de Exteriores, Kamal Jarrazi, confirmó que EU había pedido oficialmente la intervención de Irán para acabar con la insurrección shii en Irak.
Ayer una delegación oficial iraní aterrizó en Bagdad, donde se reunión con los líderes religiosos, miembros del Consejo de Gobierno y las autoridades políticas iraquíes.
Pese al aparente progreso de las negociaciones, el Ejército de ocupación ha proseguido con su despliegue en los alrededores de Nayaf, a cuyas puertas ha apostado a miles de francotiradores, marines, carros de combate y vehículos blindados.
Los soldados esperan la orden de entrar “a sangre y fuego” en la ciudad santa shii para capturar a Muqtada, quien asegura estar preparado a “dejarse matar y convertirse en un mártir de la ocupación”.
