Reuters
BOGOTÁ, COLOMBIA.- El Ejército de Colombia lanzó ayer una ofensiva contra guerrilleros izquierdistas y paramilitares de ultraderecha en dos regiones de Colombia en medio de la que se desataron cruentos combates que dejaron 48 muertos, una de las cifras más elevadas de los últimos meses en medio del conflicto interno, informaron las autoridades.
Los combates más intensos se registraron en una zona rural del municipio de Villanueva, en el departamento del Casanare, 300 kilómetros al noreste de Bogotá, en donde el Ejército atacó un grupo de paramilitares, ilegales grupos armados que combaten a la guerrilla izquierdista y que son acusados de cometer las peores violaciones a los derechos humanos en medio de la confrontación.
En los choques armados perdieron la vida 21 paramilitares y diez efectivos militares, uno de los saldos más elevados de los últimos meses en medio de la ofensiva del Ejército contra esos ilegales grupos armados.
Los combates se produjeron en medio de una extensa región petrolera y ganadera de extensas sabanas en donde operan varios grupos paramilitares que enfrentan a las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Pese a que el Gobierno del presidente Álvaro Uribe inició en 2003 una negociación de paz con los escuadrones paramilitares, con la que busca la desmovilización de unos 20 mil combatientes de esos ilegales grupos armados antes del 31 de diciembre de 2005, mantiene su ofensiva contra esos ilegales grupos armados.
Fuentes del Ejército revelaron que los combates se iniciaron cuando una patrulla militar interceptó una caravana de paramilitares que se desplazaba por la zona.
Por otra parte, 17 rebeldes de las FARC perecieron en combates contra tropas de la Cuarta Brigada cerca a la localidad de Llanogrande, una zona selvática en límites entre los departamentos de Antioquia y Chocó, unos 320 kilómetros al noroeste de Bogotá.
Colombia, país de más de 40 millones de habitantes, exportador de petróleo, café, carbón, flores y esmeraldas, afronta un conflicto interno de cuatro décadas que dejó 40 mil muertos en los últimos dos lustros.
Aunque los combates y los ataques son frecuentes en medio de la confrontación, desde hacia varios meses no se reportaba un elevado número de bajas en un solo día.