EFE
Puebla, PUE.- El grupo de 14 países que lidera Estados Unidos (G-14) en una propuesta de negociación amplia para concretar un Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) en 2005 advirtió ayer de que la discusión en Puebla atraviesa un “momento crítico”.
Los viceministros de Comercio de 34 países del continente, a excepción de Cuba, están reunidos desde el martes pasado en esta ciudad, al sur de la capital mexicana, para acordar la “arquitectura” institucional que deberán seguir las negociaciones del ALCA.
Pero las conversaciones, que en principio parecieron bien encaminadas, ahora se encuentran estancadas.
Un negociador que integra el G-14 y que pidió el anonimato señaló que la discusión atraviesa “un momento crítico”, pero que “todavía se está a tiempo” de evitar un fracaso o de que la reunión se alargue, como indicó el Mercado Común del Cono Sur (Mercosur).
“Se está a tiempo de que eso no ocurra. El trabajo esta noche se alargará hasta tarde y los copresidentes (de la negociación, Brasil y EU) producirán un documento para acercar las posiciones”, dijo.
El estancamiento se produjo por las diferencias en los temas agrícola y de acceso a mercados entre el G-14 y el Mercosur.
El secretario argentino de Comercio Internacional, Martín Redrado, señaló que aunque hay acuerdos en temas como las políticas de competencia y las compras gubernamentales, el antidumping y los derechos compensatorios, el problema sigue siendo el acceso a mercados, especialmente en servicios e inversión.
Sin embargo, las fuentes del G-14 consideraron que este bloque ya hizo esfuerzos al rebajar sus expectativas y llamó al Mercosur a flexibilizar su posición.
“El Mercosur debe ser más flexible en el tema agrícola. Es una demanda muy ambiciosa y quiere resolver cosas que ni siquiera se han resuelto en la Organización Mundial de Comercio (OMC)”, concluyó.
Uno de los negociadores que integra el G-14 y que pidió el anonimato señaló que su bloque “ha hecho concesiones significativas” en temas como compras de gobierno, inversiones y servicios, y que esperan que el Mercosur “sea más flexible”.
“La percepción es que al Mercosur le corresponde moverse y moderar sus expectativas. El G-14 considera que ya hizo esfuerzos en esa parte”, agregó.