EFE
LOS ÁNGELES, EU.- El sueño de Andy García está a punto de ser realidad con el rodaje de su primer filme como director para el próximo verano, mientras paga con sus trabajos como actor el colegio de sus hijos.
Por eso su rostro está en las marquesinas de los autobuses, intentando llevar al público a ver Twisted, un filme de suspenso que protagoniza junto con Ashley Judd y Samuel L. Jackson, y en el campo de la publicidad televisiva, donde promociona las maravillas de una compañía telefónica y otra de televisión satelital.
“Hay que pagar la escuela de los niños. Hice más dinero en dos horas (filmando un comercial) que en ocho meses rodando Modigliani”, confirmó el actor, casado desde hace 24 años y padre de cuatro hijos.
De hecho, el último de su prole, el único varón, nació mientras rodaba Twisted en San Francisco, película que también entraría dentro del capítulo de trabajos “alimenticios”, que ayudan a mantener a la familia, aunque el actor de origen cubano es mucho más educado al describirlo.
“Son películas comerciales, de estudio, que funcionan con un presupuesto completamente diferente a esas otras que me gustan”, agregó.
Con la frase “esas otras” García se refiere a su soñado proyecto desde hace más de una década, Lost City, adaptación de la novela La ciudad perdida, de Guillermo Cabrera Infante, con la que quiere debutar como director.
“Ya tengo una fecha de comienzo para el 15 de junio”, afirmó sobre el rodaje, que tiene planeado que transcurra en República Dominicana y en el sur de Florida.
Ambos lugares reproducirán la Cuba de antes de la revolución, donde transcurre una historia con tintes de Casablanca.
Claro que las cosas cambian “semana a semana”, acepta resignado acerca de este proyecto independiente que aún no tiene distribución y cuyo presupuesto es de 20 millones de dólares.
“Si te digo la verdad, casi lo prefiero así, porque incluso si tengo que hacerlo por menos dinero tengo más libertad”, admitió, una lección que ha aprendido con Modigliani, filme donde además de interpretar al famoso pintor fue productor “creativo” y vivió en carne propia lo que es rodar una película de poco presupuesto.
“Mi camerino era una caravana que podía haber sido de Django Reinhart hace 40 ó 50 años, con una lámpara colgada del centro y donde no me podía ni poner de pie. El primer día el equipo de producción pensaba que me volvería a Los Ángeles al día siguiente”, dice mientras se ríe ahora del penoso rodaje, perdido en Rumania.
Estas penurias se vieron equilibradas por un rodaje en el que dominó la creatividad, “totalmente liberados del sistema”, una experiencia que espera se repita durante el rodaje de Lost City, al menos en lo que a creatividad se refiere.
Son muchos los que le acompañan en este tortuoso camino hacia su debut como director, como Dustin Hoffman y Robert “Bobby” Duvall, “que seguro estarán allí”.
Otros, como Javier Bardem o Benicio del Toro, son algo más complicados porque se les juntan los compromisos con otros proyectos, aunque la posposición del rodaje de Che, al que ambos estaban vinculados, les puede dejar tiempo libre para trabajar con García.
“Son personas encantadoras y hombres de palabra, además de actores geniales”, les adula el futuro realizador, que no tiene ni tiempo para el nerviosismo ante el gran número de cosas que le quedan para preparar. Se trata de un sueño arriesgado y cada vez más próximo que no carece de red de seguridad, precedido de otro rodaje de estudio, en este caso millonario, como es la segunda parte de Ocean’s Eleven.
“La primera funcionó y el guión es divertido, así que todos llegamos sabiendo lo que hacemos”, admite García con la seguridad de que, pase lo que pase con Lost City, sus hijos podrán seguir asistiendo al colegio.
Cubano de corazón
Hijo de un abogado cubano, Andy García salió en 1961 para instalarse en Miami. Estudió en la Universidad Internacional de Florida y tras graduarse se mudó a Los Ángeles en busca de un oportunidad, donde estuvo trabajando en diversos oficios: como camarero y como botones en el Hotel Beverly Hilton.
-Su primer trabajo artístico le llegó con la famosa serie televisiva Canción Triste de Hill Street (1985).
-Tras esta primera toma de contacto con el mundo de la interpretación comienza en el cine con papeles pequeños en los que su origen latino se funde con sus personajes.
-La primera película en la que participa se tituló A Night in Heaven (1983) a la que siguieron otros títulos destacables como Black Rain (1989) de Ridley Scott. Pero su verdadero reconocimiento tanto a nivel nacional como internacional lo consiguió al intervenir en la película de Francis Ford Coppola, El Padrino III.
-Quizás en los años noventa su intensidad de trabajo haya disminuido con la aparición de nuevos talentos latinos como el internacional actor español Antonio Banderas.
-En 1996 estuvo en nuestro país (España), concretamente en Granada, para rodar Muerte en Granada, un largometraje en el que dio vida al poeta andaluz Federico García Lorca.
-Lleva casado muchos años con María Victoria con la que tiene tres hijos Dominik, Daniella y Alessandra, aunque debido a la gran protección que ejerce sobre su familia y privacidad poco ha trascendido de su vida personal. Es conocida su afición por la música cubana y ha hecho sus pinitos en este campo actuando en conciertos de algún músico amigo.
-Su atractivo físico y su aspecto de caballero apuesto y sobrio le han facilitado en más de una ocasión el trabajo.
FUENTE: Agencias
