El SPM altera, en ocasiones, por completo la vida de quien lo padece.
Son pocas las mujeres que pueden decir que nunca han sufrido un cólico cuando está próxima a aparecer la regla o durante los días que dura, pero hay muchas para las cuales esos dolores resultan frustrantes, son causa de aislamiento y pérdidas económicas, ya que las obligan a dejar de trabajar.
Se trata de un asunto común, que es conocido como SPM (Síndrome Premenstrual) entre los médicos y que se caracteriza por dolores (dismenorrea) de cabeza, muscular y de espalda.
Cantidad de mujeres piensan que es un asunto muy personal, pero lo cierto es que afecta a más de 50% del sexo femenino en edad reproductiva, siendo su mayor incidencia en aquellas de entre 15 y 30 años.
Alternativas
Para quienes son víctimas mensuales de este trastorno existen alternativas que van desde baños con agua tibia, infusiones de manzanilla y bolsas de agua caliente hasta medicamentos que contienen ibupofreno, como es el caso de days.
Este fármaco alivia cólicos e inflamaciones menstruales y premenstruales y actúa eficazmente contra dolores de cabeza, musculares y de espalda.
Además está indicado para atajar otros dolores como el dental, de oídos y también baja la fiebre. Es decir, su efecto va más allá de los días del periodo o previos.
El malestar
Se pudiera pensar que es exageración de las mujeres, sin embargo hay que padecerlo para comprender cuán molesto es, puesto que se conjugan diversos síntomas y sentimientos que provocan manifestaciones poco comprensibles para el resto de las personas.
Síntomas de irritabilidad, impaciencia, cambios de humor, depresión, insomnio, ansiedad, pérdida de confianza, somnolencia, desinterés por las tareas diarias y el trabajo, así como repetidos conflictos con todo lo que la rodea y, a todo esto, hay que agregarle el terrible dolor de los cólicos.
Cabe señalar que el SPM altera, en ocasiones, por completo la vida de quien lo padece, ya que en casos severos se presentan otras señales físicas como hinchazón de abdomen, retención de líquidos en manos y tobillos, mareos, desmayos, náuseas, vómitos, sudor, aumento de líquidos en las mamas e hipersensibilidad en los pezones y dolor.
Otras mujeres tienen reacciones de conducta, por ejemplo, cambios en el apetito, como comer chocolates, dulces y antojos, así como consumir alcohol.
Las causas
Algunos estudios señalan que entre las causas conocidas del síndrome son los bajos niveles de serotonina, un importante neurotransmisor que ayuda a regular el humor y el apetito los días antes de la menstruación y que está relacionado con la depresión, así como la deficiencia de calcio, la cual interfiere con la síntesis de dopamina, lo que causa alteraciones sicológicas y conductuales.
Las investigaciones han establecido que el SPM pudiera estar relacionado con una alteración en el metabolismo de las prostaglandinas, sin embargo, aún no existe evidencia al respecto. Se recomienda que las mujeres que sufren por el SPM ingieran frutas y legumbres, aumenten el consumo de agua y jugos, procuren relajarse, leer un libro que les guste, así como practicar algún ejercicio para favorecer la circulación.