El desarrollo de una ciudad no debe limitarse a las inversiones económicas y a la generación de empleos, después de todo no sólo de pan vive el hombre. Por este motivo es necesario alimentar el espíritu con las manifestaciones artísticas.
Alguna vez José Martí escribió que para ser un pueblo libre tiene que ser un pueblo culto. El debate de altura es indispensable para el crecimiento de una metrópoli, de ahí la importancia de leer, ver cine, escuchar música y por supuesto asistir al teatro.
Esta noche Torreón se viste de gala para inaugurar el Teatro Nazas. Por primera vez el telón se abrirá para que el Ballet Montecarlo presente La Cenicienta, es un escenario que en el pasado fue cine y lo mismo proyectó estrenos de época que películas del Santo y en su decadencia se convirtió, para tristeza de la ciudad, en templo de la pornografía.
Hoy después de grandes esfuerzos, sobre todo de un patronato conformado por empresarios, quienes trabajaron en coordinación con el Gobierno del estado, el Nazas volverá abrir sus puertas.
Al cruzar por el bulevar Independencia es posible apreciar el desarrollo económico experimentado por Torreón en los últimos años, el cual hoy se verá complementado con la inauguración de un inmueble que albergará expresiones artísticas de primer nivel.
Danza contemporánea, ópera, por supuesto obras de teatro, todo podrá ser apreciado en el Teatro Nazas, un lugar con historia que volverá la vida al centro de Torreón. Sólo resta desear larga y fructífera vida a este recinto porque señores, tercera llamada, la función ha comenzado.