Durango

El rostro del desempleo

Aumenta índice de despidos injustificados

El Siglo de Durango

Alejandro Salazar Becerra ya no cree en México. El motivo: desde noviembre está desempleado.

Alejandro, a sus 32 años, es padre de dos hijos. Técnico contable, nunca ha trabajado en un despacho. Siempre le piden experiencia; la falta de oportunidades le han impedido adquirirla.

Desesperado, el año pasado viajó a los Estados Unidos. La vida allá no fue fácil. La soledad fue el enemigo a vencer todas las noches. El recuerdo de sus pequeños constantemente lo obligaba a pensar en volver. Finalmente regresó a Durango. Hoy Alejandro es uno de los 300 casos que diariamente acuden ante el Servicio Estatal de Empleo en busca de una oportunidad de trabajo.

Los anuncios del Gobierno Federal de que se han incrementado las fuentes de empleo y que México está superando los índices de pobreza son mitos para Alejandro Barraza.

-La mejoría ha sido para las familias que están en el poder. Ellos nunca nos dejan subir.

Hasta abril del 2003 Alejandro laboró en una empresa de tortillas de harina. El bajo sueldo lo obligó a cruzar la frontera. En Estados Unidos trabajaba en una plantación de tabaco. Ganaba 280 dólares a la semana y cuando mejor le iba tenía ingresos de hasta 550 dólares. Ahora su realidad es otra y la desesperación su fiel compañera.

Pocas oportunidades

La escenografía es triste en la oficina del Servicio Estatal de Empleo: una larga mesa de madera con sillas a su alrededor brinda ?hospedaje? a quienes acuden a buscar una oportunidad. Jóvenes, hombres, mujeres, adultos, todos cumplen el ?ritual?: llenar solicitudes con sus datos. Todos tienen un solo objetivo: encontrar trabajo.

Benjamín Ávila Guzmán, titular del Servicio Estatal de Empleo, comenta que diariamente reciben un promedio de 300 solicitudes tanto de Durango como de la ciudad de Gómez Palacio. En su mayoría son jóvenes pero... la bolsa de trabajo no genera oportunidades. Muy pocos obtienen respuesta.

Las solicitudes que se reciben por parte de las empresas y particulares requieren obreros y trabajadoras domésticas.

Los menos solicitados, por paradójico que parezca, son los profesionistas, además de que son muy mal pagados.

Benjamín Ávila Guzmán no duda cuando afirma que la situación es más difícil en la ciudad de Durango, a diferencia de Gómez Palacio. Finalmente está en un polo de desarrollo industrial y, por ende, las oportunidades son más.

Otra historia

Técnico agrícola, con 38 años de edad, Ramiro Valles Mijares forma parte de esa lista interminable de personas que diariamente desfilan por los pasillos del Servicio Estatal de Empleo. Desde noviembre del 2003 no consigue colocarse y su situación es cada vez más desesperante.

A pesar de contar con una especialidad, nunca la ha podido ejercer, siempre ha trabajado dentro de las oficinas de gobierno. Reconoce que toda su vida fue burócrata pero ahora busca una oportunidad donde sea, aunque admite que le gustaría conseguir otro trabajo dentro del sector oficial.

Ramiro Valles es divorciado. Tiene un hijo de 13 años al cual debe entregar pensión alimenticia. Ésta es su principal motivación para seguir en su lucha: encontrar trabajo.

Su primogénito, su motivación, no vive con él. El ?heredero? radica en Guadalajara. Ramiro no deja de pensar en él.

Recuerda que tiempo atrás laboró durante algunos años en el Instituto de la Cultura del Estado de Durango. Posteriormente consiguió un contrato de ocho meses en el Instituto Duranguense de Educación para Adultos; ahí se desempeñaba como técnico docente en el municipio de Canatlán. Para su desgracia el contrato terminó en noviembre. Desde entonces ha sido un constante peregrinar para encontrar trabajo.

-Cuando cumples los 35 o más años, ya casi nadie te quiere contratar. En el IDEA ganaba cuatro mil 300 pesos al mes y de algo me servían; ahora que no tengo trabajo me he visto en la necesidad de vivir en la casa de mis padres.

-¿El gobierno de Vicente Fox afirma que hay oportunidades de trabajo para toda la burocracia?

-No es así. A mí sí me a afectado la reducción de la burocracia que ha implementado el gobierno de Fox. El discurso de que somos menos pobres y que mejoran las familias no es verdad; el ?cambio? no me ha beneficiado para nada.

Crece el problema

El problema del desempleo, lejos de disminuir, va en incremento y prueba de esto es cómo aumentan las demandas laborales en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje por los supuestos despidos injustificados.

Ana Bertha Adame García, presidenta de dicha dependencia de representación social, menciona que a finales del año pasado existía un promedio de 13 audiencias diarias por supuestos despidos injustificados; actualmente, a dos meses de haber iniciado el año, ya son 15 las que se tienen. Las expectativas son que las cifras se incrementen.

Los números son fríos y no mienten: durante el 2003 se tuvieron 947 demandas laborales, en su gran mayoría por estos despidos que diariamente se van generado. Actualmente, en lo que va de enero y febrero del 2004, ya suman 155 los casos registrados. De continuar esta tendencia se rebasarán los casos registrados durante el año pasado.

Las coincidencias

Ramiro y Alejandro diariamente revisan los anuncios clasificados. Acuden a cuanta oportunidad de trabajo se presenta, pero hasta el momento no han tenido la suerte de ser contratados. Invierten en fotografías, en comprar solicitudes, en el periódico y en ocasiones hasta en exámenes médicos y la respuesta siempre es la misma:

-Nosotros nos comunicamos con usted.

Ambos no pueden conciliar el sueño, ambos no pierden la fe, pero ya no creen en las autoridades.

-Los niños no saben de esto, solamente piden de comer y lo que necesitan de su escuela. Finalmente no tienen por qué saber... son niños, dice con tristeza Alejandro. Él tal vez se regrese a los Estados Unidos; su paciencia terminará en abril. Ramiro no piensa, por el momento, dejar la ciudad.

Alejandro y Ramiro son parte de las cifras. Ambos son desempleados, ambos tienen familia y los dos siempre se duermen con la misma pregunta:

-¿Hasta cuándo encontraré trabajo?

COLOCACIONES

Bolsas de trabajo

A diferencia de otras bolsas de trabajo que operan, ya sea en instituciones públicas o privadas, el Centro Empresarial de Durango (Coparmex), en lo que va del año, ha logrado colocar al 90 por ciento de los solicitantes de empleo que han acudido ante dicha institución.

Gilberto Sánchez Rodríguez, presidente de la Coparmex Durango, reconoce que la situación actual que se vive en Durango y en el país es crítica.

Comenta que por tratarse de un problema social, en dicho organismo empresarial se ha tratado de darle ese sentido, de ahí que el servicio de la bolsa de empleo que operan se abriera no sólo a las empresas socias, sino a todas aquellas que requieren algún tipo de mano de obra o algún especialista.

Durante los meses de enero y febrero se recibieron un total de 60 solicitudes de aquellos que buscan una oportunidad. Afortunadamente 54 de éstos pudieron ser acomodados en empresas, que representan el 90 por ciento.

El organismo actualmente realiza un esfuerzo para buscar el mejor perfil de los solicitantes y poder ofrecer a sus socios trabajadores que les garanticen mayor competitividad, de ahí la importancia de también poder promover la capacitación constantes.

OPORTUNIDADES

Se incrementan solicitudes

Diariamente se reciben 300 solicitudes de trabajo en el Servicio Estatal de Empleo (Durango y Gómez Palacio).

- En la ciudad de Durango es más grave el problema, ya que en la Comarca Lagunera de Durango se tienen más oportunidades de empleo.

- En la bolsa de trabajo se solicitan principalmente obreros generales y trabajadoras domésticas.

- Son pocas las solicitudes que se tienen para contratar profesionistas, pero además se ofrecen salarios bajos.

- Cuando se presenta alguna crisis el fenómeno del desempleo es adverso para Gómez Palacio; se incrementa la gente despedida.

FUENTE: Servicio Estatal de Empleo.

REPORTE

Hay 15 audiencias diarias

Actualmente se atienden en promedio 15 audiencias de supuestos despidos injustificados.

- Se ha incrementado este tipo de casos, ya que a finales del 2003 eran en promedio 13 las audiencias.

- Durante el 2003 se recibieron un total de 947 demandas laborales.

- En lo que va de enero y febrero del 2004, suman 155 las demandas recibidas.

- En el 80 por ciento de los casos se logra llegar a una conciliación.

FUENTE: Ana Bertha Adame García, presidenta de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje.

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