Reportajes

El Sida ya no es sinónimo de muerte

MARÍA ELENA HOLGUÍN

Día Mundial de la lucha contra el Sida|Los recursos económicos son la clave

EL SIGLO DE TORREÓN

Gracias al avance en las investigaciones en la actualidad la enfermedad es un padecimiento controlable

TORREÓN, COAH.- Después de más de dos décadas de la aparición del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (Sida) como pandemia, desde un estricto sentido médico se ha dejado de considerar al virus sinónimo de muerte y es asumido como un padecimiento controlable, aunque por otro lado tiende a convertirse en una enfermedad devastadora en virtud de la pobreza.

Para el investigador de la Clínica de Inmunobiología Especializada en Pacientes con el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), Rafael Argüello Astorga, las instituciones de salud en el país tienen mucho por hacer para garantizar a los pacientes el tratamiento que les ayudará a prolongar una vida con calidad, para lo cual se requiere desarrollar las tecnologías necesarias y adaptarse a la gama de medicamentos que actualmente están disponibles.

Como ninguna otra enfermedad en la historia de la humanidad, el Sida ha sido objeto de una exhausti-va investigación científica en un periodo de tiempo muy corto, mediante cuyos resultados se le ha dejado de asumir como un mal que no tiene solución, a diferencia de la época en la que surgió la pandemia, cuando se conocía poco y la realidad superaba los alcances de la ciencia.

Los descubrimientos científicos importantes han repercutido directamente en el manejo farmacológi-co.

Al decir del investigador, la capacidad económica del paciente y en mayor escala, de los países, es ahora determinante en el manejo apropiado de la enfermedad, dado que en las naciones del primer mundo el Sida ha dejado de ser causa mortal y ha pasado a formar parte de la lista de padecimientos incurables, pero que se les puede mantener bajo control.

En nuestro país, un enfermo de Sida que tenga los recursos suficientes, puede acceder al tratamiento adecuado que le permita aminorar los síntomas, ahuyentar las complicaciones e incluso, hacer imperceptible la presencia del virus en el organismo.

Rafael Argüello expone que en las instituciones de seguridad social hace falta el abastecimiento oportuno de medicamentos y ampliar la gama de los que están disponibles en el mercado, además de que la práctica de estudios de laboratorio debe realizarse a los pacientes apegada a las indicaciones médicas, mas no a las de carácter administrativo que suelen regir el funcionamiento de clínicas y hospitales públicos.

En este sentido, señala que a los pacientes que están bajo control en las instituciones de seguridad social, no se les somete a los estudios que demanda el esquema médico por cuestiones administrativas o económicas, lo que influye en un monitoreo deficiente y restringido que no permite conocer los efectos del medicamento en el organismo.

Tanto la carga viral (prueba que permite medir las copias del virus presentes en la sangre y por lo tanto, el éxito o el fracaso del medicamento) como la cuenta de células CD4 (las que se encuentran en los glóbulos blancos y son infectadas por dicho virus), son estudios que deben practicársele al paciente cada tres meses, pero en ocasiones se le ordenan sólo una vez por año.

En el aspecto humano, es imprescindible actuar con rigor profesional hacia los enfermos de Sida, pues la queja generalizada de quienes cuentan con derechohabiencia a instituciones como el Seguro Social, es que son objeto de actitudes discriminatorias, deshumanizadas y poco confidenciales cuando acuden a consulta o a solicitar medicamentos, pues más de tres personas que no son médicos, suelen enterarse de su mal.

Esto, incluso, ha sido factor para que pacientes conscientes de que son seropositivos, abandonen el tratamiento o no hayan acudido nunca a solicitarlo, pues aún prevalece la condición de rechazo y menosprecio de parte de la sociedad.

Tan sólo el tratamiento antirretroviral (ARV) tiene un costo promedio de 15 a 20 mil pesos por paciente, sin contar el medicamento que éste pueda requerir para contrarrestar las infecciones oportunistas a causa de las bajas defensas, principalmente en las vías aéreas superiores o de carácter intestinal.

En ocasiones, el enfermo demanda otros medicamentos para reducir los efectos por los cambios metabólicos, que son causados por los propios ARV; en cuanto al manejo de estudios de laboratorio de carga viral y cuenta de CD4, éste alcanza un costo aproximado de tres mil a cinco mil pesos por cada uno.

El investigador de la Clínica de Inmunobiología refiere que una de las principales complicaciones se deriva de la falta de apego al tratamiento por parte del paciente, lo que puede deberse a cuestiones económicas o la propia ignorancia de los efectos negativos que tiene el llevarlo de manera irregular, lo que condiciona la resistencia del virus a alguno de los medicamentos, la progresión de la enfermedad y la necesidad de cambiar el fármaco, de tal manera que se pueden agotar los esquemas que existen.

En el largo plazo, las consecuencias son avanzar hacia la fase sintomática con algunas complicaciones letales como la neumonía o septicemia.

Investigación

La Clínica de Inmunobiología cuenta con médicos especialistas en Inmunología, químicos y biólogos que además de brindar atención a los pacientes seropositivos, realizan labor de investigación que en los próximos años, esperan ver reflejada en la aplicación de metodología de laboratorio para determinar la resistencia del virus a los medicamentos que se están suministrando a los enfermos.

Rafael Argüello explica que uno de estos estudios, fue desarrollado para tratar de encontrar ciertas mutaciones genéticas que confieren resistencia al VIH, las que fueron detectadas en pacientes seropositivos de origen europeo.

Se trata de un gen, denominado PCR5, que trae consigo una mutación, cuya persona que lo porta es resistente a la infección o evoluciona lentamente, de manera que puede nunca desarrollar síntomas.

Este gen es común en la población europea, pues se considera que lo porta de un 20 a 25 por ciento de la población seropositiva, mientras que en nuestra localidad, donde se practicó el estudio, es sólo del 1.5 por ciento.

En este caso, el especialista refiere la enorme necesidad de que en México se desarrolle todo un trabajo científico para medir las resistencias al virus con base en las características genéticas de su población, pues hasta ahora todos los estudios que se han desarrollado al respecto han sido en pacientes anglosajones, con variantes genéticas muy diferentes a las nuestras.

Más mujeres casadas infectadas

El epidemiólogo de la Jurisdicción Sanitaria Número Seis, Humberto Flores Muñoz, refiere que además de los homosexuales, los hombres que sostienen relaciones íntimas con personas de ambos sexos constituyen los grupos más peligrosos en cuanto a la transmisión de la enfermedad.

Por esta razón, es que cada vez se reporta un mayor número de mujeres casadas infectadas, lo cual se refleja en el hecho de que mientras en la década de los ochentas la proporción de hombres y mujeres infectados era de 17 a 1, actualmente se ha reducido de cinco a uno, es decir, que por cada cinco varones hay una mujer que porta el virus.

La epidemia es, para las instituciones que conforman el Sector Salud, un serio aspecto por atender en cuanto a labor de información y prevención, partiendo de que la principal vía de transmisión es el contacto sexual en un 91.4 por ciento de los casos, seguida por la transfusión sanguínea con un 6.1 por ciento y la perinatal, con un 2.1 por ciento; el 0.4 por ciento restante es por vías no determinadas.

Se considera que el 49.1 por ciento de los casos registrados por transmisión sexual corresponde a población homosexual y bisexual, mientras que un 42.3 por ciento es en relación a los heterosexuales.

Para Humberto Flores, un hombre promiscuo que tiene relaciones sexuales sin protección con varias parejas, sean hombres o mujeres, trae consigo un riesgo potencial de adquirir el virus y transmitirlo a su cónyuge.

De ahí la importancia de incrementar las campañas de detección en mujeres embarazadas, toda vez que si el virus se encuentra en una fase temprana de la gestación, hay mayores posibilidades de que el producto no sea infectado.

En la actualidad la Secretaría de Salud en esta ciudad mantiene a 15 enfermos de Sida bajo tratamien-to médico, y para este año la dependencia estatal autorizó cinco espacios para casos nuevos; se considera suficiente tomando en cuenta que la mayor parte de los pacientes son absorbidos por el IMSS.

Información vital

Información es el factor clave para los organismos e instituciones dedicadas a promover la prevención del Sida y el respeto a los enfermos, pues a pesar de toda la labor científica desarrollada en torno a la epidemia, prevalecen tabúes y prejuicios.

Para Raymundo Valadez Andrade, coordinador del Proyecto Por Ti, Asociación Civil, los jóvenes están más abiertos al ejercicio de su sexualidad pero sin la información necesaria para evitar ser parte de las estadísticas.

Por una parte, considera, el sistema educativo en nuestro país no se ha abierto lo suficiente hacia una educación sexual que desde niños, les permita conocer e identificar el origen de la enfermedad, para que de esta forma sean más tolerantes y conscientes de su sexualidad.

A la vez, en el entorno familiar prevalece cierta resistencia a tocar cualquier tema relacionado con el sexo, a pesar de que es el círculo en el que el individuo debe recibir toda la información de manera orientada, pues en otras circunstancias, lo hace mediante sus compañeros de escuela, amigos u otras vías en forma distorsionada.

A través de la labor de información y orientación que esta agrupación desarrolla en las escuelas, se ha detectado que aún hay niños y jóvenes que piensan que el Sida se puede contagiar tocando al enfermo, ?igual existen adultos que creen lo mismo?, refiere.

La generalidad de los estudiantes de secundaria sabe qué es un condón pero algunos no tienen idea de cómo usarlo; otros por creencia popular de que disminuye la sensación durante el coito lo rechazan, y todo ello influye en las cifras de embarazos no deseados y por su puesto, de enfermedades de transmisión sexual.

?Realmente el mal que nos aqueja no es el padecimiento, sino el machismo con el que hemos sido educados y que obstaculiza toda esta función de formar individuos conscientes y orientados para ejercer su sexualidad libremente, pero con responsabilidad?.

Respecto de los derechos que como seres humanos tienen los portadores del VIH, Raymundo Valadez considera que todavía falta mucho por hacer en nuestro país para lograr el respeto que como individuos merecen.

?Nos conmovemos ante un enfermo de cáncer pero rechazamos a quienes padecen Sida por el origen de su enfermedad... las dos son enfermedades incurables independientemente de la causa?.

LOS DERECHOS

Entre los principales puntos de la Cartilla de los Derechos Humanos de las Personas con VIH o Sida figuran:

· Los enfermos no están obligados a someterse a la prueba de detección de anticuerpos del VIH ni declarar que viven con el virus o han desarrollado la fase sintomática.

· En ningún caso deben ser objeto de detención forzosa, aislamiento, segregación social o familiar por vivir con el VIH o haber desarrollado Sida.

· Si desean contraer matrimonio, no podrán ser obligados a someterse a ninguna de las pruebas de detección (Artículo 262, Fracción X del Código Civil.)

· Vivir con VIH o Sida no es impedimento para el ejercicio de la sexualidad.

· Cuando soliciten empleo, no podrán ser obligados a someterse a ninguna de las pruebas de detección del VIH, como tampoco debe ser motivo para ser despedidos.

· No se les puede privar del derecho de recibir educación, sea en instituciones públicas o privadas.

· Es una garantía buscar, recibir y difundir información precisa y documentada sobre los medios de propagación del VIH y la forma de protegerse.

· Recibir servicios de asistencia médica y social, así como una atención médica digna y el historial médico debe manejarse con confidencialidad.

· Tienen derecho a una muerte y servicios funerarios dignos.

FUENTE: Cartilla de los Derechos Humanos de las Personas con VIH o Sida

LAS CIFRAS

Los alcances de la enfermedad constituyen la preocupación diaria de las instituciones de salud pública, las que deben reforzar las campañas de prevención e información a la comunidad.

· México registra más de 90 mil casos acumulados de enfermos de Sida hasta este año, desde 1980.

· Se estima que existen 160 mil personas infectadas con el VIH.

· Los casos de Sida bajo tratamiento antirretroviral suman 11 mil 996 en nuestro país.

· Más del 97 por ciento de los casos registrados corresponden a personas mayores de 15 años y hasta los 45.

· El Estado de Coahuila ocupa el lugar 16 a nivel nacional, con mil 213 casos acumulados hasta el 13 de noviembre de este año.

FUENTE: Registro Nacional de Casos de Sida

Leer más de Reportajes

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Reportajes

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 122135

elsiglo.mx