20 de febrero de 2004.
Tokio, (EFE).- Las autoridades japonesas han reforzado la seguridad en el país ante el temor a posibles atentados terroristas, informaron hoy diferentes medios de comunicación locales.
El refuerzo de la seguridad, que no ha sido confirmado de manera oficial, se ha traducido en un aumento de la vigilancia armada en los aeropuertos, las centrales nucleares y otros puntos sensibles del país, posible objetivo de ataques terroristas.
El aumento de la alerta se produce poco después de un atentado frustrado esta semana contra la Agencia de Defensa y mientras se espera el veredicto por el juicio contra el líder de la secta Verdad Suprema, Shoko Asahara, acusado de preparar los atentados con gas sarín en el metro de Tokio en 1995.
Ese incremento de la seguridad antiterrorista también se produce tras el reciente envío de tropas japonesas a Irak, el mayor contingente que sale de Japón desde la II Guerra Mundial.
Según las informaciones de los medios locales, el aumento de la vigilancia alcanza el mismo nivel que el que las autoridades dispusieron en marzo de 2003, durante la invasión de Irak.
El incremento del alerta terrorista hizo temblar a los mercados financieros y provocó la más profunda caída del yen con respecto al dólar de las últimas 10 semanas.
