Aseguro que la fuerza militar en todos los casos, tiene que estar mediada por la ONU.
27 de mayo 2004.
México, (Notimex).- El presidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció hoy el valor que tuvo México para oponerse a la intervención militar, al considerar que no estaban agotadas las vías de solución pacífica del conflicto en Irak.
"Creemos que el recurso a la fuerza tiene que ser de naturaleza absolutamente excepcional, previo agotamiento de todas las vías de negociación y que, en caso de producirse, debe contar con el total apoyo de las Naciones Unidas", enfatizó.
Durante la Sesión Solemne de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, en la vieja casona de Xicoténcatl, Rodríguez Zapatero arrancó los aplausos de los senadores y diputados al recordar que a su llegada al Gobierno español determinó retirar las tropas españolas de territorio iraquí.
"Nada más asumí las funciones como presidente del gobierno, ordené el regreso de tropas españolas de Irak, pues una intervención que se había iniciado sin la adecuada cobertura de las Naciones Unidas estaba cada día más lejos de poderse centrar en las dos cuestiones esenciales a las que inicialmente estaba llamada: impulsar la reconstrucción del país y garantizar la seguridad de la población", aseveró.