Cuando el barniz de las uñas se endurece
¡Cuántas veces al ir a aplicarnos el barniz de uñas nos encontramos con que no se puede usar porque ha espesado demasiado! Bien, puede usted salir del paso añadiéndole unas gotas del removedor y dejándolo hacer su obra unos cuantos minutos. Después agite el frasco y proceda a aplicarlo. La adición del removedor no cambia el color del barniz, pero sí lo opaca un poco. Por lo tanto, éste es un procedimiento de emergencia nada más, que le permitirá sin embargo, usar el producto unas cuantas veces más.
¿Va a hacer un pastel?
Si es de dos capas y sólo tiene usted un molde hondo, para cortar el pan en dos partes, es decir, horizontalmente a la mitad, haga lo siguiente: coloque un cordón en el centro de todo su derredor por la parte lateral y apriételo como si fuera a hacerle un nudo. Tire de él para que lo divida y pronto tendrá dos mitades perfectas, mucho más sencillo que tratar de sacar las dos capas con un cuchillo.
Vinagre en el pastel, ¡qué locura!
¡Espere un momento! No lo va usted a agregar a la pasta, sino a la cobertura. Una cucharadita de él en ésta, evitará que al cortarlo se rompa. Y tenga la seguridad de que la preparación ni sabrá ni olerá a vinagre.
Congele las velas
Cuando vaya a adornar con velas, déjelas varias horas en el congelador, si es posible de un día para otro, a fin de que se congelen bien, y no las saque de allí hasta la hora de usarlas. Dos o tres horas después de que las encienda estarán todavía del mismo tamaño y se quemarán tan parejas, que no habrá diferencia entre unas y otras. Una recomendación solamente: Si traen envoltura plástica, antes de meterlas al congelador, quíteselas, pues podrían adherirse a ella, resultando muy difícil quitárselas al sacarlas.
Sin agujeros en la pared
Si no le agrada que queden agujeros en sus paredes cuando quite un cuadro, aquí tiene una idea para que los instale sin que después dejen alguna señal. Primero coloque dos tiras de ?masking tape? por detrás del cuadro y otras dos de igual longitud, concordando con ellas, en la parte de la pared donde va a poner el cuadro. Luego ponga un pedazo de cinta adhesiva por ambos lados, entre las dos tiras de ?masking tape?. De este modo, al cabo de una semana o un año, el cuadro se podrá quitar con facilidad sin que se maltrate para nada la pared. Este procedimiento es sólo para cosas ligeras pero si su cuadro tiene un marco pesado, use entonces para colgarlo uno de esos alfileres que tienen una cabeza apropiada para sostener cosas más pesadas y que usted empuja haciendo fuerte presión con sus dedos, pero que son tan delgados, que al quitarse lo que sostienen sólo queda en la pared un agujero que apenas sí se ve y que se puede rellenar con una pizca de pasta dental teñida al color de la pared, ya sea con un lápiz de color o con algún colorante de cocina.
Un alhajero económico
Si tiene una bonita caja de plástico transparente, conviértala en alhajero poniéndole un pedazo de algodón cortado muy parejo en el fondo de modo que lo cubra totalmente, allí podrá guardar cómodamente buena parte de sus alhajas.
¿Sobró papel tapiz?
Si acaba de tapizar alguna pared con papel vinílico, aproveche los pedazos sobrantes para hacer manteles individuales con el reverso cubierto de papel autoadhesivo.
Un cereal diferente
Para variar, en vez de azúcar póngale a su cereal jalea o mermelada le dará un sabor completamente distinto, que podrá variar a su gusto.