Los jugadores mexicanos tuvieron la calma para tocar la pelota y "dominar el partido".
11 de agosto 2004.
Volos (Grecia), (EFE).- México sufrió nuevamente por su ineficacia para convertir en goles su superioridad en el campo y debió conformarse hoy con un empate a cero ante Mali en la primera jornada del grupo A del fútbol de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Antonio La Volpe se dio por satisfecho con el resultado debido a los nervios que implicaron este partido.
El dominio mexicano fue constante y sus jugadores tuvieron la calma para tocar la pelota, "dominar el partido" y preparar media docena de ocasiones de gol, pero a sus delanteros les falló la puntería para romper el cerco de los africanos.
Omar Bravo, de las Chivas del Guadalajara, tuvo dos remates de cabeza y Rafael Márquez, del Morelia, desperdició otra ocasión en las tres jugadas más claras que tuvo México en este partido, jugado en el estadio Panthessaliko de Volos, 324 kilómetros al norte de la ciudad olímpica de Atenas.
Los mexicanos terminaron el encuentro con un mal sabor de boca y Malí se llevó un resultado que defendió con esfuerzo y que al final ha dejado a los dos equipos con un punto en este grupo que comparten Grecia y Corea del Sur, que empataron 2-2 en el otro partido del grupo.
El área mexicana fue un lugar poco concurrido en la primera mitad y la mayoría de las veces que Jesús Corona tuvo la pelota fue por iniciativa de su defensa para organizar la salida en busca de sus delanteros.
Mali apostó a frenar el ataque mexicano con un juego en línea que provocó que los rivales quedaran varias veces en fuera de lugar y que al final fue su mejor atributo para mantener el empate en lo que ha sido su debut en el fútbol de los Juegos Olímpicos.
En la segunda parte, los africanos salieron a toda velocidad para buscar una sorpresa y la tuvieron pronto con una jugada vertical de Ndiaye, que frente al portero mexicano resolvió mal y mandó el balón fuera del campo.
México se aprovechó de las debilidades futbolísticas de los africanos que dirige Omar Koné para controlar el partido y aumentar la presión sobre el rival.
Lavolpe intentó darle mayor poder de ataque al once mexicano y sacó al brasileño-mexicano Antonio Naelson, Zinha, para darle la oportunidad al mexicano Ismael Iñíguez, un jugador que siempre responde.
0. México: Jesús Corona, Francisco Rodríguez, Mario Pérez, Israel López, Aarón Galindo, Antonio Naelson Zinha (Iñíguez, m.70), Diego Martínez, Luis Pérez (Ponce, m.46), Omar Bravo, Hugo Sánchez y Rafael Márquez.
0. Mali: Chieck Bathily, Mamadi Berthe, Adama Tamboura, Boubacar Kone, Tenema Ndiay (Abouta, 74), Abdou Traore, Dramane Traore (Doucoure, m.81), Momo Sissoko, Jimmy Kebe, Moussa Coulibaly, Mamadou Diallo.
Árbitro: Subkhiddin Mohd Salleh (MAS) asistido por Carlos Torres (PAR) y Liu Tiejun (CHN). Amonestó a Dramane Taore (m.59) y al mexicano Martínez (m.88)
Incidencias: Partido disputado el estadio Panthessaliko de Volos con poco público en las gradas al darse la coincidencia que a la misma hora jugaba el equipo local, Grecia, en una noche calurosa con pocos efectos sobre los jugadores de México y de Mali.