LONDRES, INGLATERRA.- Las ganas del Chelsea frenaron ayer la calidad del Arsenal para concluir el choque europeo de Stamford Bridge con un reñido empate a uno, que deja pendiente la resolución de los cuartos de final para la próxima cita en Highbury Park.
El conjunto de Arsene Wenger, que estuvo impecable en los primeros compases, arrancó con mucha más fuerza que su anfitrión, y también fueron los cañoneros los que gozaron de las primeras ocasiones claras de gol.
Comenzó el holandés Dennis Bergkamp, en el minuto siete, dando el primer susto de la noche al meta suplente del Chelsea, Marco Ambrosio, que logró salir de este primer apuro.
Instantes después, era el medio francés Robert Pires, uno de los jugadores más notables ayer del Arsenal, el que disparó a puerta y estuvo a punto de estrenar el marcador para los visitantes.
El partido cobraba un ritmo trepidante y el once de Wenger se hacía visiblemente con el dominio del balón. Ahora era Sol Campbell, con un espléndido remate de cabeza, el que ponía contra las cuerdas a Ambrosio, con poca fortuna.
Si los primeros veinte minutos estuvieron controlados prácticamente por un majestuoso Arsenal, los pupilos de Claudio Ranieri despertaron a partir del 21’, con una acción iniciada por el internacional francés Claude Makelele, que fue a parar a manos del islandés Eidur Gudhjonsen y que casi esquiva al meta germano Jens Lehmann.
El Chelsea se fue haciendo progresivamente con las riendas y de nuevo el ex del Real Madrid tuvo otra oportunidad de marcar, en el minuto 26.
Una bonita acción individual del rumano Adrian Mutu, clave en el cuadro local, alentó las esperanzas de los aficionados del Chelsea, que por un momento vieron el balón en la portería del Arsenal.
El holandés Bergkamp, asistido por el brasileño Edú, tuvo otra ocasión preciosa en el minuto 33, con un tiro cruzado que paró a tiempo el meta reserva del Chelsea, Marco Ambrosio, que ayer protagonizó su debut en la Liga de Campeones.
El dominio local se materializó a comienzos del segundo tiempo, con el primer gol de la noche para el Chelsea, a consecuencia de una negligencia de Lehmann y que logró el islandés Eidur Gudjohnsen.
El jugador islandés aprovechó la salida del alemán de la portería para despejar un balón que acabó siendo aprovechado por Gudjohnsen, que desde el borde del área dio la ventaja al conjunto de Ranieri con un potente disparo largo.
Al poco tiempo, Frank Lampard tenía otra buena ocasión de incrementar la ventaja, y más tarde la tuvo Gudjohnsen, pero la creciente presión en la zaga visitante alertó al Arsenal, que volvió a ponerse las pilas.
Pires niveló el marcador para los cañoneros, con un remate de cabeza en el minuto 59 tras aprovechar un centro por la izquierda de Ashley Cole.
El ritmo del partido fue frenético durante los últimos veinte minutos, con los dos equipos buscando llegar al área contraria y deshacer el empate.
Arsene Wenger sacó al español José Antonio Reyes, sustituyendo al sueco Freddie Ljungberg, en el minuto 77, aunque el ex del Sevilla no tuvo ayer su mejor noche.
El argentino Crespo, otro de los suplentes para el Arsenal -reemplazo de Adrian Mutu- se convirtió en el tramo final del partido en una peligrosa amenaza para los dominios de Lehmann.
Gudjohnsen volvió a buscar el gol de la victoria, pero su pase fue despejado a tiempo por el capitán del Arsenal, el medio francés Patrick Vieira.
Pese a que el conjunto de Ranieri presionó más en estos últimos minutos, su suerte se torció cuando el árbitro español Manuel Enrique Mejuto expulsó, en el minuto 84, por doble amarilla, de Desailly, que obligó al Chelsea en los últimos minutos a defender el empate.
Chelsea: Ambrosio, Gallas, Terry, Desailly, Bridge, Parker (Cole, 71’), Lampard, Makelele, Duff, Mutu (Crespo, 71’) y Gudjohnsen (Melchiott, 85’).
Arsenal: Lehmann, Lauren, Campbell, Toure, Cole, Ljungberg (Reyes, 77’), Vieira, Edú, Pires, Bergkamp (Gilberto, 71’) y Henry.
Goles: 1-0, 53’: Eidur Gudjohnsen. 1-1, 59’: Robert Pires.
Árbitro: Manuel Enrique González Mejuto (España). Sacó tarjeta amarilla a Claude Makelele y expulsó a Desailly, por doble amarilla, ambos del Chelsea.
Incidencias: Partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones disputado en el estadio londinense del Chelsea de Stamford Bridge, delante de aproximadamente 38,000 espectadores.
