EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- La Delegación Torreón de la Procuraduría Federal del Consumidor no ha recibido ninguna denuncia derivada de la presunta venta de gasolina adulterada en las despachadoras de combustible de la localidad.
El titular de la dependencia, Adolfo Franco Ruvalcaba, informó que hasta ayer no se tenía conocimien-to de queja alguna por parte de propietarios de vehículos automotores, aunque se estaba a la espera de que esto sucediera después que se han presentado algunos casos en las ciudades de Monclova y Piedras Negras.
Manifestó que de recibirse alguna inconformidad que denotara la mala calidad en el combustible, ésta sería remitida a la oficina central de la Profeco con sede en la Ciudad de México.
Lo anterior, considerando que las delegaciones estatales de la dependencia no tienen la facultad para vigilar la calidad del combustible para vehículos automotores que se expende en el interior del país, como tampoco disponen de los equipos de laboratorio adecuados para analizar el contenido de las muestras que pudieran levantarse.
A este respecto, Franco Ruvalcaba manifestó que la Delegación Torreón, al igual que las del resto del país, únicamente se encarga de organizar operativos en forma conjunta con Petróleos Mexicanos, a fin de revisar que las bombas despachadoras que se utilizan en las estaciones de servicio estén funcionando correctamente, para evitar que se engañe a los consumidores con menos producto del que solicitan y pagan.
Refirió que en lo que va de este año no se han organizado estas medidas de revisión.
La Profeco en esta ciudad se mantiene alerta a que pudieran presentarse inconformidades por parte de automovilistas, luego de que en las ciudades de Monclova y Piedras Negras ya se han atribuido las continuas fallas en las bombas y filtros de gasolina de las unidades a la dudosa calidad y contenido del combustible.
Sobre todo después de conocer por parte de los representantes de la Asociación de Distribuidores de Automóviles, el hecho de que algunos socios ya se han quejado de esta situación, a la vez alertados por compradores de las unidades quienes han resentido las fallas.
