Un estudio realizado por el Centro de Estudios Estratégicos de Washington ubica a López Obrador y a Madrazo como los más afectados por escándalos de corrupción para el 2006.
19 de julio de 2004.
México (SUN-AEE).-El Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales con sede en Washington (CSIS por sus siglas en inglés) ubica en el mismo rasero a Roberto Madrazo, líder del PRI, y el perredista Andrés Manuel López Obrador, jefe de Gobierno de la ciudad de México, en cuanto a los escándalos de corrupción y sus posibles efectos en la contienda presidencial de 2006: "Podría ser este tema una gran amenaza, los grandes perdedores podrían ser Madrazo y López Obrador".
La relevancia de los actos de corrupción podría afectar la "fortuna" de algunos aspirantes presidenciales, principalmente de estos dos adversarios políticos ambos tabasqueños con una vieja rencilla, hace notar la organización que cuenta con 190 investigadores dedicados principalmente al tema de la seguridad, uno de los grupos más serios y apartidistas de Estados Unidos.
Los ciudadanos responden en las encuestas de opinión pública que el PRI en general y Madrazo en particular mantienen prácticas de corrupción. Adicionalmente, los videoescándalos han dañado levemente a López Obrador, un político que cuidadosamente ha cultivado una imagen de político limpio (sin embargo, él no aparece en ninguna de las cintas), expone en el estudio Una Guía para las elecciones estatales de 2004 .
Más adelante considera que la política "antisistema" aplicada a López Obrador redunda en beneficio de este personaje "populista" y "demagógico", que se ofrece a sí mismo como un "hombre por arriba de los políticos", que presenta soluciones simples a los cuestiones complicadas.
El documento elaborado por George W. Grayson, de la serie de estudios Elecciones en el Hemisferio Occidental , buscan tomar en 86 páginas una minuciosa fotografía de las 14 elecciones estatales en juego en 2004 y su posible impacto en los comicios presidenciales de 2006.
Más de una docena de analistas mexicanos, entre ellos el embajador Jorge Montaño, Alfredo Phillips Olmedo, Fred Álvarez y Federico Berrueto Pruneda, participaron con algunos comentarios para enriquecer el análisis político-electoral, explica el autor.
A manera de introducción, el estudio del CSIS menciona que el presidente Vicente Fox gastó casi tres años echando discursos políticos en el país. Como resultado, los candidatos a la Presidencia han proliferado como "hongos en una húmeda caverna" y el mandatario se ha "perdido en acción". El Presidente desilusiona por su inhabilidad para mover las reformas frente a una oposición que domina el Congreso de la Unión, advierte.
Las últimas páginas examinan el impacto de las elecciones estatales en la instalación de las urnas en 2006: este año electoral (2004) es extremadamente importante por un sinnúmero de razones, pero destaca por el fenómeno de la corrupción.
Por ejemplo, será un termómetro para los esfuerzos del priísta Madrazo quien tiene una imagen de político corrupto por reclutar candidatos atractivos y mostrar una fuerte organización interna. Sin embargo, el PRI ha fallado en la renovación de sus cuadros, el cambio de su nombre, en la modificación de sus programas y no ha sido capaz de reinventarse para mostrarse como partido que puede representar un liderazgo nuevo y limpio, opina.
El PRI tiene otras opciones para la contienda de 2006. Si el tema de la corrupción lastima a este partido en 2004, los notables podrían dejar caer a Madrazo frente a otros aspirantes, entre ellos Arturo Montiel (estado de México), Manuel Ángel Núñez Soto (Hidalgo), Juan Millán (Sinaloa), Enrique Martínez (Coahuila) y Enrique Jackson (Senado), prosigue.
En contraste, explica, López Obrador parece destinado a ser el candidato presidencial del PRD. No obstante, si el asunto de la corrupción llega al fuego, se verá en serias dificultades para obtener votos fuera del tradicional paraguas perredista (la ciudad de México, Michoacán, Tlaxcala, Guerrero, Oaxaca y Zacatecas).
Por lo que toca a los precandidatos del PAN, opina que Santiago Creel, secretario de Gobernación, y Felipe Calderón, ex titular e la Secretaría de Energía, no han sido los más efectivos miembros del gabinete presidencial, pero gozan, hacen alarde de una buena imagen. Los electores han puesto mucha importancia en el tema de la corrupción frente a los prospectos para suceder al presidente Fox, pero demandan con igual firmeza resultados en la gestión de gobierno, establece.
El CSIS pone en contexto las elecciones de 2004 frente a los comicios presidenciales: el PRI está empeñado en recuperar Los Pinos, no quiere que el PAN obtenga victorias legislativas y electorales. En forma similar, el PRD tiene la sangre puesta en dirección al presidente Fox y el PAN a raíz de los videoescándalos que buscan desnudar la inmunidad política de López Obrador.
"Finalmente, a pesar de que México deja ver una llamativa liberalización, permanecen muchos elementos del viejo régimen. Ellos incluyen la persistencia de dinosaurios , como el gobernador de Oaxaca, José Murat, el (ex) aspirante del PRI a la alcaldía de Mérida, Víctor Cervera Pacheco, y el candidato a la presidencia municipal de Tijuana, (Jorge) Hank Rhon.
Ellos son los mejores ejemplos. La batalla de los gobernadores por seleccionar a sus sucesores, en parte para continuar con sus proyectos, en parte para minimizar la posibilidad de una persecución por la nueva administración. Y lo más desalentador: la fuerte tendencia por satanizar a los adversarios políticos", concluye Grayson, uno de los mexicanólogos más reconocidos en Estados Unidos.
