AP
Nueva York, EU.- La abogada Jennifer Massey tal vez se mostró demasiado agresiva como para ingresar a la nómina de Donald Trump, quien prefirió al gerente de software Kelly Perdew, de 37 años, en el capítulo final de la serie televisiva The Apprentice. Massey, de 30 años y egresada de las universidades de Princeton y Harvard, atacó como un pit bull en la sala de juntas, incluso acusando a Perdew de actos desleales a sus espaldas. Su estilo contencioso al final espantó a Trump.
?Realmente no le gustaste demasiado a tus compañeros y perdiste bastante?, dijo Trump al ?despedir? a Massey. Tal vez la perjudicó el no haber acompañado a Trump a una recepción durante la fase final de concurso televisivo. En cambio, Trump caminó hacia un helicóptero, en el que se fue volando.
Perdew recibió una oferta para trabajar en Las Vegas o Nueva York, y decidió ayudar a Trump en sus ambiciosos planes inmobiliarios en la zona occidental de Manhattan.
Perdew ganó tras medirse en una última prueba: ver quién podía dirigir mejor un evento benéfico. Massey organizó un juego de baloncesto con astros de la NBA, mientras que Perdew arregló un encuentro de polo en Connecticut.
Perdew debía decidir desde pintar un logo corporativo en el césped y también aprender una lección sobre el cuidado que exige Trump: su jefe se quejó de que su asiento en el juego de polo estaba sucio.
Massey logró que el comisionado de la NBA David Stern fuera el moderador de su evento benéfico y rápidamente consiguió una planta eléctrica cuando ocurrió un apagón.
The Apprentice tuvo una audiencia inferior a la temporada anterior: poco menos de 16 millones de televidentes, un descenso del 19% respecto a los 19.6 millones que en promedio sintonizaron el capítulo final de la primera temporada, según la empresa de medición de sintonía Nielsen Media Research.
