La Habana, (EFE).- Los ensayos clínicos de una vacuna cubana contra el cólera deben comenzar este año en Sudáfrica, Mozambique e India, donde hay incidencia de esta enfermedad, se conoció en La Habana.
La empresa cubana Vacunas Finlay S.A., que comercializa actualmente 10 productos, entre vacunas y componentes para producirlas, está negociando al respecto con entidades de esos países, según dijo su presidente, Ricardo Montero, a la edición de esta semana del periódico "Granma Internacional".
La vacuna es un proyecto conjunto entre el Centro Nacional de Investigaciones Científicas y los institutos de Medicina Tropical "Pedro Kourí" y Finlay.
El directivo explicó que en una fase anterior a los ensayos clínicos, un grupo de voluntarios recibió, de forma oral, la cepa de la vacuna viva, pero atenuada genéticamente en cuanto a su virulencia para proteger sin enfermar, mientras que a otro le fue suministrado un placebo.
En una segunda etapa -indicó- ambos grupos recibieron una cepa de cólera viva, no atenuada, y mientras el primer grupo no enfermó, ocurrió todo lo contrario con el que recibió el placebo.
El especialista indicó que el pasado año fueron presentadas tres nuevas solicitudes de patentes a la Organización Cubana de la Propiedad Industrial, una de ellas relacionada con la vacuna contra el cólera Señaló que además de ese proyecto han iniciado el proceso de registro a las vacunas antitetánica, trivalente contra la leptospirosis y la antitifoidea en Argentina, Colombia, República Dominicana, Brasil, Honduras, Venezuela y Malasia.
Dijo que el Instituto"Finlay realiza investigaciones sobre tuberculosis, amebiasis (parásitos intestinales), shigellosis (bacteria que produce enfermedades diarreicas graves), y meningitis producida por los neumococos (bacterias), la de más incidencia en Cuba.
Destacó que fue esa institución científica la que suministró la proteína para realizar la conjugación con el antígeno (principal sustancia dentro de una vacuna que propicia la inmunidad) sintético contra el haemophilus influenzae del tipo "b", una bacteria que causa la meningitis y neumonía en los primeros años de los infantes.
Esa vacuna, que a partir de este mes se está aplicando a todos los niños lactantes de la isla y cuya reactivación debe hacerse al año y medio de edad, fue considerado el descubrimiento más importante de la ciencia cubana en 2003, según dijeron autoridades del ministerio de Ciencia, Tecnología y medio Ambiente de la isla.
