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Tokio, japón.- El primer ministro de Japón Junichiro Koizumi logró ayer la liberación de ocho familiares de japoneses secuestrados por Norcorea en la época de la Guerra Fría, durante la reunión que celebró con el líder norcoreano Kim Jong-Il en Pyongyang.
“Regresaré a Japón con cinco familiares de los secuestrados en Japón”, anunció Koizumi ayer en Pyongyang, capital de Corea del Norte, luego de la reunión de 90 minutos que celebró con el líder de esa nación, según reportes de la agencia de noticias Kyodo.
El grupo de liberados está integrado por siete hijos y un esposo, cuya mujer fue liberada en octubre de 2002 con otras dos parejas japonesas y autorizadas a regresar a Tokio, dejando en Pyongyang a sus vástagos que nacieron en Corea del Norte.
Sin embargo, sólo aceptaron regresar a Tokio cinco de los ocho liberados, ya que el esposo de la mujer que regresó a Tokio en 2002 es un ex soldado estadunidense que decidió permanecer en Pyongyang al igual que sus dos hijas.
El jefe del Gobierno japonés se apuntó un gran éxito en el asunto de los secuestrados este fin de semana durante su segundo encuentro con Kim, luego del que celebraron en 2002, cuando se logró la liberación de dos parejas y una mujer japonesa.
Durante la primera reunión entre ambos países, Corea del Norte admitió ante Japón que había secuestrado a 13 ciudadanos japoneses durante la Guerra Fría a fines de los años setenta, ocho de los cuales presuntamente habrían muerto de causas naturales.
Koizumi indicó que Japón, por su parte, ofreció ayudar a Corea del Norte con el envío de 250 mil toneladas de arroz y diez millones de dólares en medicamentos “a manera de asistencia humanitaria”, de acuerdo con el reporte.
El primer ministro japonés señaló que Kim se comprometió asimismo a trabajar para encontrar una solución a la crisis sobre los programas nucleares de Corea del Norte a través de las pláticas multilaterales que tiene como sede a China.
Las pláticas multilaterales pretenden mediar entre Norcorea y Estados Unidos, que acusa a ese país de desarrollar programas nucleares en violación de tratados mutuos, y en ellas participan China, Rusia, Japón, Corea del Sur y las partes en conflicto.
“Kim Jong-II dijo que pretende erradicar la nuclearización de la península. Afirmó que quería hacer esfuerzos para lograr una solución pacífica a través de las pláticas multilaterales”, comentó Koizumi, quien afirmó estar entusiasmado a arreglar un próximo encuentro.
Asimismo, Koizumi hizo notar durante la reunión en la casa de huéspedes de Daedonggang que “Japón no emitirá sanciones mientras Corea del Norte honre la declaración Japón-Corea del Norte”, firmada en septiembre de 2002 cuando esos países tuvieron su primera cumbre.
Por su parte, el líder norcoreano le manifestó a Koizumi su beneplácito por la nueva visita a Pyongyang y por el interés mostrado en “normalizar las relaciones y esperar el éxito de ese proceso”, de acuerdo con Kyodo.
El Gobierno norcoreano, a través de la oficial Agencia Central de Noticias (KCNA), calificó el encuentro entre Kim y Koizumi como un “evento histórico”, al tiempo que destacó que la cita se desarrolló en una atmósfera tranquila, sincera y cálida.
“La reunión y las pláticas entre los líderes norcoreanos y Japón representa un evento importante e histórico para mejorar la confianza mutua y las relaciones bilaterales y promover la paz y la estabilidad en Asia y el resto del mundo”, según el comunicado.
El primer ministro japonés al concluir su breve pero exitosa visita a Pyongyang, regresó a la medianoche del sábado a esta capital.