Buenos Aires, (EFE).- Un hombre que se presentó en una oficina bancaria de Buenos Aires como un "enviado de Dios" provocó una estampida de clientes y empleados, que creyeron que iban a ser víctimas de un atentado, informó la prensa local.
"Vengo porque soy el enviado de Dios", proclamó el hombre, que iba muy pobremente vestido y llevaba una bolsa en la mano, nada más entrar en el banco, indicó el diario Crónica.
Sus palabras tuvieron como resultado la salida apresurada de todos los que estaban en el lugar y el arresto preventivo del "enviado" por el policía que custodiaba el banco.
La bolsa donde se sospechaba que llevaba una bomba quedó en medio de la escena del tumulto a la espera de que llegaran los artificieros de la policía, que poco después comprobaron que solo contenía unas pocas ropas viejas del detenido, quien al parecer tiene sus facultades mentales alteradas.
En los últimos meses se ha registrado una oleada de atentados con bombas de fabricación casera en oficinas bancarias de la capital argentina, en una de las cuales murió un guardia de seguridad al que le hizo explosión un paquete sospechoso cuando lo levantaba del suelo.
