La Asociación de Mujeres Profesionistas y Empresarias Sociales (AMPES) afirma que el problema del machismo y de la inequidad con la mujer es cultural y gran parte de esta dificultad lo tolera el sector femenino. Las nuevas generaciones opinan distinto, que existen esquemas de igualdad y que hay más apertura y comunicación.
La AMPES indica, previo al Día Internacional de la Mujer, que la inequidad de género se provoca a través de la mezcla de conceptos equivocados que dependen de la percepción y de punto de vista que sea visto una cosa o circunstancia. El problema se da por la cultura que existe en cada país y en cada región.
Laura Martínez, encargada de Proyectos Productivos de la AMPES indica que para una sociedad más equitativa debe existir equilibrio entre el hombre y la mujer en función de la dignidad.
El machismo no solamente se promueve por el hombre sino también por la mujer, afirma Laura Martínez. La mujer que acepta a un hombre macho no solamente tolera la situación. También educa a sus hijos bajo esquemas machistas. Quiere decir que el niño que crece será machista con su esposa cuando crezca.
Las mujeres también mantienen su responsabilidad. Enseñan a a sus hijas a jugar con muñecas y a sus hijos a jugar con ?carritos?. Existe una marcada idea de lo que debe ser para el hombre y lo que debe ser para la mujer.
Dice en la conferencia sustentada en el Aula Alejandro Guillot del Instituto Tecnológico de Durango, que el hombre y la mujer deben asumir su propio papel. La mujer no debe intentar ser hombre o competir con él, porque se vuelve individualismo.
María de Lourdes Rodríguez Durán, licenciada en Educación, 32 años, hoy en día piensa que un hombre y una mujer que hacen pareja deben respeterse sus particularidades y sus propias capacidades. Hombre y mujer son complemento. Ella educaría a sus hijos, cuando se case, con algunos aspectos que fortalezcan el género de ellos mismos. Reconoce que los tiempos cambian y debe existir amplitud en la capacidad en la educación de los hijos.
Karla Dense Covarrubias Martínez de 14 años estaba abrazada de su novio. Estudia el tercer año de secundaria. Dice que no hay género más importante. El hombre y la mujer son iguales porque tienen los mismos derechos.
En su casa realiza labores propias de la mujer, como es lavar, planchar y lavar platos, pero se siente capaz de hacer actividades del hombre, como cambiar focos, cambiar una llanta de un automóvil, etcétera.
¿Cuestión generacional?
La conferencia ?Perspectiva de Género?, que sustentó la Asociación de Mujeres Profesionitas y Empresarias Sociales (AMPES), fue presidida por personalidades políticas y empresariales feministas. María del Rayo Cortés, presidenta de la organización lanzó una pregunta al público, ¿Quién es más importante, el hombre o la mujer?
-La mujer, contestaron todas las asistentes a la conferencia.
La AMPES indica que el preferencialismo y convencionalismo de un sector de género favorece las opiniones hacia su misma sección. Hubo muchas mujeres jóvenes, pero también mujeres maduras. Las conferencistas fueron: María Elena Estrada, diputada, Yolanda de la Torre, diputada; María del Rayo de Cortés de la AMPES y Laura Martínez, también de la AMPE.
Las mujeres jóvenes que fueron entrevistadas opinaron que la igualdad de género es importante para tener una buena relación.
