Agencias
BAQUBA, IRAK.- Una bicicleta bomba mató a seis personas cuando finalizaban las plegarias de ayer en una mezquita shiita del centro de Irak, en un recordatorio de que pocos están a salvo del conflicto en el país.
Previamente, insurgentes opuestos a la ocupación estadounidense lanzaron cohetes contra un hotel de Bagdad ocupado por occidentales, y cientos de efectivos norteamericanos allanaron casas en el pueblo natal de Saddam Hussein, con la esperanza de capturar a los organizadores de esos ataques.
En Baquba, 65 kilómetros al norte de Bagdad, atacantes desconocidos adosaron un cilindro de gas lleno de explosivos a una bicicleta y la dejaron afuera de una pequeña mezquita shiita, cerca de personas que rezaban en la acera debido a la falta de espacio en el interior del templo.
“Al final de las plegarias, explotó”, dijo el sargento de la policía iraquí Haki Ismail Mustafa. Funcionarios de un hospital cercano dijeron que tenían conocimiento de 39 heridos.
Baquba es un área de mayoría sunita, bastión de la resistencia contra la ocupación. Las fuerzas estadounidenses han realizado importantes operaciones dentro del pueblo y en sus alrededores para tratar de capturar a los insurgentes.
Los shiitas constituyen alrededor del 60 por ciento de los 26 millones de iraquíes pero en general fueron excluidos del poder bajo el Gobierno de Hussein, un sunita. Las tensiones entre las dos comunidades musulmanas han sido notables en la lucha por el poder en la era post Hussein.
Intercambio de disparos
Nadie resultó lesionado en el ataque del amanecer contra el hotel Burj al-Hayat en el centro de Bagdad, utilizado por muchos empresarios extranjeros y contratistas estadounidenses. Tres cohetes impactaron habitaciones alrededor del cuarto piso y destrozaron ventanas, dijeron los guardias se seguridad.
“Tres hombres en un vehículo impactaron el hotel con cohetes, rompiendo ventanas y el muro del hotel”, dijo el guardia de seguridad Mishar Muhammed.
Los guardias dijeron que intercambiaron disparos con hombres en el vehículo antes de que se diera a la fuga. En Tikrit, el pueblo natal de Saddam Hussein, las tropas estadounidenses allanaron casas con la esperanza de detener insurgentes.
Alrededor de 300 soldados de la cuarta División de Infantería respaldados por vehículos blindados Bradley y aviones militares buscaron sospechosos, armas y otros materiales incriminatorios en una de las mayores operaciones realizadas por fuerzas estadounidenses en las últimas semanas.
“Fue una buena noche”, explicó el teniente coronel Steven Russell a los reporteros después de las redadas, en las que unas 30 personas fueron detenidas. “Mañana Tikrit será un lugar más seguro como resultado” de eso, afirmó.
Las autoridades estadounidenses dijeron que aún investigan qué causó la caída de un helicóptero el jueves, en la que murieron sus nueve ocupantes estadounidenses cerca del pueblo de Fallujah, 50 kilómetros al oeste de Bagdad y escenario de incesantes ataques guerrilleros contra fuerzas de la coalición.
Un testigo dijo que el helicóptero ardía en llamas antes de estrellarse. Algunos informes señalaron que podría haber sido alcanzado por un misil.