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MÉXICO, DF.- El ex presidente Miguel de la Madrid declaró el martes por la noche que en México, más que un vacío de poder, hay un “desvío” y una “falta de ejercicio adecuado” del mismo, lo que ha propiciado la “judicialización” de la política.
“Yo creo que hay que cuidar que no se llegue a extremos. Creo que sí, el Poder Judicial Federal tiene la misión de cuidar la constitucionalidad de los actos de los demás Poderes, pero no hay que llevar a extremos este proceso”, advirtió.
El constitucionalista Mariano Palacios Alcocer había advertido, durante una conferencia magistral, qué tan grave es para la vigencia del Estado de Derecho “el desbordamiento del poder como la atonía del mismo”.
Igualmente había planteado que las instituciones han detenido el nivel de su marcha, que no se han cumplido las expectativas planteadas al inicio del gobierno y simplemente el diálogo entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo no ha fructificado.
Parte de ello se debe, dijo Palacios, a que las bancadas de los partidos en la Cámara de Diputados han sido más expresión de las disputas y ahora ya no basta con vencer en las campañas políticas, sino hay que ganar en los tribunales.
Esto es lo que, a grandes rasgos, el constitucionalista llamó la “judicialización de la política”, con lo que De la Madrid estuvo de acuerdo.
Reunidos en lo que fuera la casa de Venustiano Carranza, en la presentación de la propuesta de Reforma Electoral federal del gobernador de Coahuila, Enrique Martínez y Martínez, constitucionalistas y politólogos coincidieron que la situación política es delicada.
De la Madrid dijo que hay que buscar el acortamiento de los tiempos en las campañas electorales, incluyendo la limitación de las precampañas; hay que limitar el excesivo costo de éstas.
Aunque rechazó la existencia de una crisis política en México derivada de los escándalos por la corrupción de políticos, sí aceptó que hay “anormalidades” que hay que combatir y aunque falta mucho para 2006, “desde ahora hay que ir limpiando el camino.
En este sentido, también advirtió que el llamado destape anticipado de candidatos por la Presidencia de la República enrarece el ambiente político nacional. “A mí me parece, sí, que no hay que precipitar las candidaturas”.
