Primera de dos partes
es curioso, cuanto más se vulnera el Estado de Derecho, más se utiliza la fórmula como un recurso retórico sin consecuencia en los hechos. El muestrario de la semana de cómo se puede poner en duda la prevalencia de ese Estado, fue por demás elocuente. Aunado a ello, los valores relacionados con el Derecho y la justicia, la conducta legal y la conducta ética se pervierten de más en más. Esos conceptos y valores se han trastocado en simples palancas, herramientas o recursos aplicables según la circunstancia política o social prevaleciente. Así, día con día, se vulnera el Estado de Derecho.
*** Carlos Ahumada, el empresario, amigo y padrino del grupo perredista que encabeza Rosario Robles recuperó un buen número de sus negocios. La Procuraduría General de la República resolvió devolverle su avión, su periódico (ahora inexistente) El Independiente, así como el Club Deportivo León en virtud de no haber encontrado elementos para fincarle el delito de lavado de dinero. Con un “usted disculpe”, todo quedó arreglado. En ese rubro, Carlos Ahumada es un hombre honorabilísimo al que, probablemente, habrá que pedirle perdón por todo lo que se le ha hecho. Sin embargo, el jueves, en entrevista con Carmen Aristegui, el hermano de ese empresario, Roberto -expulsado del país por no tener supuestamente en regla sus papeles migratorios-, declaró que la devolución de esos negocios no es por las razones expuestas por la Procuraduría que encabeza Rafael Macedo de la Concha. Según Roberto Ahumada, su hermano negoció con el Gobierno Federal los más famosos videos del año, y de ahí la conclusión de ese caso. Sobra decir que Roberto asegura que Carlos Ahumada es un protegido del Gobierno foxista, sobre todo por lo que representa en la causa de vulnerar al jefe del Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador. Es más, el hermano considera que antes de diciembre Carlos Ahumada sale de la cárcel. El complemento del cuadro es la amiga del empresario, Rosario Robles. Ya regresó de España y como si nada hubiera ocurrido, emprende de nuevo, con relativa discreción, su actividad política porque una cosa es estar involucrada con aquel empresario, haber metido a su ex partido en la peor crisis que pudiera imaginarse y haberlo quebrado financieramente, y otra muy distinta dejar de hacer política. Qué importa la descalificación.
*** Dolores Padierna encabeza el “Movimiento por la Esperanza” para defender a Andrés Manuel López Obrador del desafuero. Al lado de la diputada perredista, sin dejarse ver pero dejándose sentir, su esposo mueve de nuevo los hilos de la red de poder que logró construir en el Distrito Federal y como, a pesar de haber aparecido en televisión embolsándose miles de pesos entregados por Carlos Ahumada, no pasó nada y él sigue su vida, Bejarano regresa por sus fueros. Desde luego, Andrés Manuel López Obrador se deslindó de esos sus defensores. Lo hizo con la misma tibieza y cuidado que cuando se deslindó de su ex secretario particular y ex líder de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, René Bejarano. Seis meses han pasado desde que se vio aquella escena del dinero y como, desde entonces, nada le ha pasado a René Bejarano, pues la circunstancia favorece su idea de reposicionarse. Vaya abogados del jefe del Gobierno capitalino.
*** Sergio Estrada Cajigal no podrá disfrutar plenamente el fin de semana en Cuernavaca, la capital del estado que gobierna: tiene que rendir su Informe ante el Congreso de esa entidad. Si bien la ceremonia podría ser, como se ha visto, un trámite bastante complicado, a Estrada Cajigal se le dificulta un poco más. El Congreso local lo tiene sujeto a juicio político en virtud de que, hace meses, el jefe de la policía ministerial fue detenido y encarcelado por prestar excelentes servicios, desde luego a cuenta del Gobierno del estado, al narcotráfico. Recibía, descargaba y transportaba droga en vehículos oficiales y con personal de la corporación a su cargo. Hubo, desde luego, la consecuente y consabida crisis política en Morelos y, en ese marco, el Congreso resolvió enjuiciar al Gobernador. Sin embargo, fervoroso creyente del Estado de Derecho, Estrada Cajigal consiguió una suspensión otorgada por la Suprema Corte y asunto arreglado. El Gobernador gobierna como si nada hubiera pasado, aunque, claro, tendrá un mal domingo. Pero eso es todo.
*** Cuatro años y ocho meses después de haber sido detenida en Brasil a solicitud del Gobierno mexicano, Gloria Trevi salió de la cárcel en Chihuahua y, desde el martes, ofrece un nuevo espectáculo. Un juez la encontró inocente de los cargos de corrupción de menores, violación agravada y rapto. La encuesta de Reforma sobre la inocencia o la culpabilidad de la cantante relacionada con Sergio Andrade arroja una opinión dividida. Sin entrar al juego de calificarla de inocente o culpable, la conclusión del caso es impresionante. O se le arrebataron cinco años de vida a una persona, o bien, se dejó libre sin terminar de purgar su pena a una delincuente. Gloria Trevi aparece así como víctima de un largo y lento proceso judicial que le restó cinco años de libertad, o bien, aparece como la beneficiaria de un sistema judicial opaco que, justamente por esa característica, impide saber qué resortes o palancas se movieron. Como quiera, el nuevo espectáculo de su biografía está ya montado. Venga con la sentencia el nuevo contrato de exclusividad.
*** Viejas escopetas, relucientes machetes y vestidos regionales constituyen la estampa de las mujeres mazahuas que, en su desesperación, exhiben su decisión de recurrir a la violencia, ante la desatención de su demanda. Más grave aún, amenazan con inmolarse, con hacerse estallar si las autoridades no atienden su reclamo derivado de los daños provocados a sus tierras por las instalaciones hidráulicas del sistema Cutzamala. Las autoridades federal y estatal se hacen de la vista gorda frente a la exhibición y portación de esas armas, tal y como se han hecho de la vista gorda ante el problema que aqueja a esas mujeres y las lleva al extremo en que se encuentran. En qué va a terminar ese conflicto, quién sabe. De seguro, se buscará tratar de aliviar el problema en lo posible, atemperar los ánimos y, luego, arrumbar la solución de nuevo. Lo que se echa de menos en este asunto es la contundente declaración del secretario de Gobernación asegurando que, ahora sí, ya no se permitirán transgresiones al Estado de Derecho que rige la imperturbable marcha de la instituciones. Qué pasó, venga el boletín correspondiente.
*** En Tlaxcala se hizo valer el Derecho, pero se atropelló a la ética. Ante ese cuadro, Maricarmen Ramírez, la candidata a suceder a su esposo Alfonso Sánchez Anaya en la gubernatura, con toda entereza escogió hacer valer el Derecho. En la lógica de la esposa, lo demás es lo de menos. Si, desde un principio, se vio el problema en que se iba a meter el Partido de la Revolución Democrática, los capítulos subsecuentes hacen un drama de la comedia.
Continuará mañana
El partido exige que el esposo deje la gubernatura, el esposo dice que no; insiste el partido, el esposo acepta pedir “un permiso sin goce de sueldo” al Congreso y, desde luego, el Congreso dice que no. Todo hace pensar que la redacción de la solicitud del permiso estaba hecha para ser rechazada y, ahora, con enorme pena, el gobernador dice: me quedo en el Gobierno. La esposa está retecontenta, es candidata y primera dama, además de figura nacional porque, obviamente, Marta Sahagún la apoya e incluso llama a debatir la participación política de las primeras damas que quieren sustituir a sus esposos en el Poder Ejecutivo que ocupan. Viva el Derecho, muera la ética política.
*** Qué es de él, quién sabe. Desde hace más de seis meses el secretario de Finanzas del Distrito Federal, Gustavo Ponce, que gustaba de ir a jugar en Las Vegas, se le esfumó de las narices al Gobierno de la capital. Si alguien sabe de él o se lo encuentra, no estará de más que lo entere de que tiene orden de aprehensión, ahora, por lavado de dinero. Nomás por tenerlo al tanto, nomás por decirle que se le echa de menos.
*** Todos estos asuntos han tenido reflejo en el curso de esta semana que concluye y, quizá, ellos justifican que la cereza del batidillo en medio del cual al Estado de Derecho lo suplanta un deprimente Estado de ánimo, es la declaración del ministro-presidente de la Suprema Corte Justicia, Mariano Azuela. Cuando la figura más importante del sistema judicial se ve obligada a explicar que sí estuvo en Los Pinos con el presidente Vicente Fox, con el secretario Santiago Creel, con el procurador Rafael Macedo de la Concha para tratar el desafuero del jefe del Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, pero asegura que ello no vulnera la autonomía y la independencia de la Corte que preside, se entiende por qué se pueden dar los otros asuntos reseñados. Todo el peso de ese encuentro, el Poder Ejecutivo se lo dejó caer al Poder Judicial. Azuela tuvo cuando menos el detalle de salir a dar una explicación formal, cosa que no ocurrido con Fox. Tan dado, sobre todo antes, a salir a dar mensajes en cadena nacional, esta vez el jefe del Poder Ejecutivo ha querido salir del problema haciendo declaraciones de banqueta. Ningún pronunciamiento formal, serio, claro y contundente.
*** Si esta relación de hechos registrados esta semana se prolongara un poco más, sería claro que el Estado de Derecho se está vulnerado de manera brutal, bárbara. Que es, hoy por hoy, un recurso retórico que de tanto usarlo ha perdido todo valor. Y, visto que al Gobierno le encanta instalar mesas, armar debates sobre cualquier ocurrencia, convocar al diálogo sin propósito ni sentido, lanzar iniciativas sin respaldo ni consecuencia, no estaría de más organizar un debate sobre la conveniencia de sustituir en la Constitución el concepto de Estado de Derecho por el de un deprimente Estado de ánimo. Al menos, habría un poco más de congruencia.
