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QUERÉTARO, QUERÉTARO.-El líder nacional del PAN, Luis Felipe Bravo Mena, calificó al Gobierno de Cuba como “una dictadura decrépita”, después de que Fidel Castro emitiera ayer una crítica contra el Gobierno mexicano.
La declaración de Bravo se lanza un día después de que se diera a conocer que no se permitirá a los mexicanos en general seleccionar al candidato panista para la presidencia en 2006, sino que el esquema de selección seguirá cerrado a sólo los militantes y a los miembros adherentes del partido.
Durante su intervención al concluir la Asamblea Nacional panista, Bravo Mena se refirió a los regímenes políticos: “Es hora de luchar por que el México libre y democrático que defiende los derechos humanos aquí y afuera debe continuar por más que les pese a las dictaduras decrépitas que esclavizan a sus pueblos y los bañan de saliva apestosa”, en alusión al régimen de Fidel Castro.
Más tarde, en conferencia, el dirigente del Partido Acción Nacional (PAN) dijo que emitió esos calificativos para el Gobierno cubano porque son verdad, aunque rechazó que las relaciones entre ambos países pudieran romperse por decisión de México.
“No puedo anticipar algo así, porque en primer lugar no le corresponde al partido, corresponde a una valoración, a un análisis de la Secretaría de Gobernación”, señaló.
Añadió que “está muy claro que esta dictadura decrépita, como le he llamado, ha roto cualquier marco de trato civilizado entre gobiernos y, más aún, con un gobierno como el mexicano que ha dado siempre un trato respetuoso al Gobierno de Cuba”.
Sobre el tema opinó el senador Diego Fernández de Cevallos, quien dijo: “Deseo que ambos gobiernos puedan arreglar esas diferencias, que no son buenas para ninguno de los dos. Creo que ambos pueden y deben hacer un buen esfuerzo para que su relación mejore”.
Sobre el líder cubano, con quien mantiene lazos de amistad, refirió: “Castro tiene luces y sombras, pero ciertas conductas que él ha tenido no las comparto”.
