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MÉXICO, DF.- La Secretaría de Hacienda y el Congreso serán los que decidan cómo se realiza la fusión entre Nacional Financiera (Nafin) y el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), reconocieron los directores generales de ambas instituciones.
En entrevistas por separado, el director de Nafin, Mario Laborín consideró que el proceso debe hacerse lo más pronto posible; mientras que el de Bancomext, Héctor Reyes, aclaró que no intervendrá. Recientemente el presidente Vicente Fox anunció que la banca de desarrollo está en un proceso de reinvención total, y como paso siguiente “vamos a fusionar Nacional Financiera con Banco de Comercio Exterior, para así lograr mucho mayor eficiencia y un respaldo bancario, financiero, no sólo a la tarea nacional sino a la tarea internacional”.
Sobre el tema, el titular de Bancomext, Héctor Reyes Retana, señaló que la institución continúa realizando sus actividades normales de apoyo a las empresas exportadoras, y sus consejerías en el mundo siguen trabajando, una de las cuales acaba de abrir en China.
Aclaró que la Secretaría de Hacienda y el Congreso son las instituciones que realizan el estudio para fusionar ambas bancos de desarrollo, y aunque Bancomext no interviene en este proceso, acatará la decisión que se apruebe al respecto.
Por su parte, el director general de Nafin, Mario Laborín Gómez, coincidió en que Hacienda y el Congreso estudian la fusión, pero en lo particular “me encantaría que fuera lo más pronto posible”.
Entre los beneficios de consolidar una fusión, mencionó que habría mayor eficiencia en el gasto, porque recursos que se destinan a la burocracia se orientarían a financiar a las empresas, se mejorarían productos y se evitaría duplicarlos, además de aprovechar las mejores prácticas del mundo.
Además, habría una compactación importante de la burocracia, que en el caso de Nafin ha pasado de cuatro mil a 900 trabajadores en los últimos años, a pesar de lo cual ha aumentado su atención a 450 mil empresas, contra las 15 empresas que atendía en 2000.
“El chiste es copiar las mejores prácticas del mundo y poner esos recursos en manos de las empresas”, agregó Laborín Gómez.
Sobre la oposición de los sindicatos a la fusión de Nafin y Bancomext, reconoció que a nadie le gusta que se reduzca la platilla laboral, pero es un proceso que debe hacerse para que la banca de desarrollo sea más competitiva, “si no, tarde o temprano vamos a desaparecer”.
Para Laborín Gómez, la lideresa sindical de Nafin, María Luisa Velázquez, “ha sido muy preactiva” en el proceso que ha emprendido la institución para mejorar su funcionamiento, salir de la quiebra en que se encontraba y aumentar su capitalización de 6 a 13 por ciento.
Los directores de Bancomext y Nafin fueron entrevistados durante la firma de convenios de estas instituciones con la Secretaría de Economía, como parte de las acciones del Sistema Nacional de Financiamiento a Pequeñas y Medianas Empresas.
