19 de junio de 2004
Lisboa, (EFE).- La selección griega está a un paso de hacer historia, ya que en el Grupo A, y contra pronóstico, es el equipo que más opciones tiene de estar en los cuartos de final antes de la última jornada, en la que se mide a la frágil Rusia.
Además de enfrentarse al que ha sido el equipo más flojo del grupo, su victoria ante Portugal, el empate ante España y el partido que sus anteriores rivales deben afrontar también mañana sitúan a los griegos en lugar privilegiado en los cálculos para acceder a la siguiente ronda.
Un punto le clasifica automáticamente para los cuartos de final, e incluso, según lo que suceda en el otro partido de grupo, hasta una derrota podría llevarle a protagonizar la gesta más alta de su historia.
Armar un equipo disciplinado y serio al más puro estilo del alemán Otto Rehhagel le ha supuesto a Grecia encontrarse en una situación inesperada. Nunca habían ganado un partido en la fase final de un gran torneo y ya lo consiguieron, por lo que si la fiesta en Grecia fue grande tras ganar en la jornada inaugural, la clasificación para cuartos será considerada como un título.
Una vez descubierto el camino, el guión de Rehhagel es claro: orden, disciplina y poca, muy poca, fantasía, para rematar la faena ante un equipo ruso, que nada se juega en el envite de mañana.
Sin embargo, ante el rival de mañana el seleccionador de Grecia deberá haber cambios en el centro del campo ante la lesión de Stylios Giannakopoulos y la sanción del cerebro del equipo Giorgios Karagounis.
La lesión de Giannakopoulos supondrá la casi segura presencia en el once titular de Vassilis Tsartas, que ante España jugó en la segunda parte y fue el autor del pase del gol que supuso el empate final.
Además, el defensa central Trainos Dellas se ha resentido de una una lesión que sufrió antes de la Eurocopa, pero se confía en que no tendrá dificultades para estar mañana en este histórico partido de su selección.
El desahuciado equipo ruso será toda una incógnita. Si con la posibilidad de clasificación en los anteriores partidos su motivación desapareció en algunas fases del partido, ahora que nada se juega, poco se espera de su respuesta en el campo ante un equipo crecido.
Al margen del cambio obligado en la portería por la expulsión de Sergei Ovchinnikov, Georgi Yartsev podría dar entrada en el equipo a alguno de los jugadores inéditos en el campeonato, lo que supondría otra revolución, ya que ante Portugal cambió cuatro jugadores iniciales y hasta de sistema.
Alineaciones probables:
- Rusia: Malafeyev, Anyukov, Sharonov, Bugayev, Yevseyev, Bystrov, Loskov, Alenichev, Karyaka, Kerzhakov y Sychev.
- Grecia: Nikopolidis, Seitaridis, Kapsis, Dellas, Fyssas, Georgiadis, Katsouranis, Zagorakis, Tsartas, Vryzas y Haristeas.
Arbitro: Gilles Veissiere (FRA)
