Integrantes del Cabildo exigen a su compañero, el regidor panista Guillermo López de Lara, arreglar su situación legal por la detención de que fue objeto el domingo pasado, y que fuera liberado bajo fianza, al considerar que de girársele una orden de aprehensión, de acuerdo con la Constitución Política, estaría obligado a separarse del cargo edilicio.
Bajo el argumento de que el Ayuntamiento y sus miembros deben mantener un respeto al pueblo que los eligió, ayer en la sesión adelantada de Cabildo, el regidor José Antonio Delgado Herrera sacó a relucir la participación de López de Lara en un zipizape violento que se realizó en el fraccionamiento Las Nubes, y a consecuencia de lo cual se le detuvo por parte de la Policía Ministerial.
Subrayó que ?nosotros como miembros del Cabildo tenemos que mantener una conducta un tanto decorosa, creo que de respeto al pueblo, el cual nos eligió en su momento?, enfatizó.
Y además se pronunció por la conformación de una comisión que revise la situación de las personas que fueron agredidas, con el objetivo de conocer la realidad y dar un seguimiento al caso de violencia por parte del Ayuntamiento de Durango.
Ante ello, planteó la pregunta al edil panista López de Lara: ?¿Qué situación legal guarda con relación a la detención que tuvo y de la cual salió en libertad bajo fianza?, ya que de acuerdo a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se prevé que en caso de girar la orden de aprehensión, indudablemente tendría que dejar la posición que actualmente ocupa como regidor?.
Y en caso contrario, de que fuera liberado de toda responsabilidad, ?quisiera que nos informara al respecto, todo esto por la buena armonía de este cuerpo edilicio que fue electo por el pueblo y para el pueblo, y al cual debemos todo el respeto?.
?Esperamos una respuesta adecuada, porque se la tenemos que dar al pueblo y no es posible que este cuerpo colegiado esté ofendiendo con violencia, independientemente de partidismos, a un pueblo al cual nos debemos y por el cual fuimos electos?, insistió.
Presente en la reunión, el regidor panista aludido contestó que su situación jurídica estaba en las instancias competentes, por lo que no podía responder con una situación definida.
Por su parte, el alcalde José Aispuro Torres dijo que la honorabilidad de todos los integrantes del Cabildo debe quedar a salvo, pronunciándose por la conveniencia de estar atentos a las investigaciones que se realicen en torno al caso en que participó el regidor panista.
Y solicitó al Secretario del Ayuntamiento verificar el grado de salud de las personas agredidas, a fin que de ser necesario sea el propio Ayuntamiento la instancia que atienda la situación, para lo cual también propuso que la Comisión de Salud fuera la encargada de hacerlo.
NEGACIÓN
Asunto político
El gobernador Guerrero Mier rechazó que la liberación del regidor Guillermo López de Lara haya sido por cuestiones políticas, al recordar que ahora está sujeto a un proceso jurídico en el que tendrá la última palabra un juez, para que deslinde de cualquier responsabilidad al edil panista, o solicite la orden de aprehensión.
Desde su punto de vista, el agente del Ministerio Público actuó correctamente al no solicitar la orden de aprehensión y dejar tal decisión en un juez, por lo que ahora el regidor del PAN que participó en hechos violentos el domingo pasado, al término de la votación, estará sujeto a la resolución de un funcionario jurisdiccional.