La contradicción es el punto de partida para crear los seres de la obra de Daniel Gordillo
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Europa representa para el artista americano, el ideal de pureza técnica y el perfeccionamiento de la disciplina, existentes en la cultura occidental y ambicionados en las occidentalizadas. Esto es parte de lo que se puede observar en la obra de Daniel R. Gordillo u artista aparentemente nuevo pero con un amplio sentido de la plástica.
“Puesto que el corazón y el espíritu siempre quedan vinculados a la tierra en que han nacido, el aprendizaje en el viejo continente no obedece sino a la búsqueda de reconocerse y construirse con la esencia de lo propio y lo obtenido en la experiencia, es decir, lo que uno es y lo que uno hace”, comenta el autor.
Esta obra será inaugurada el día jueves seis de enero en la Casa del Cerro, la cita es a las 8:30 de la noche. Toda la obra es un trabajo realizado por Daniel Gordillo en España, donde actualmente cursa sus estudios de arte.
Al respecto de su obra Daniel tiene muy claro hacia dónde va y qué lo empuja hacia esos conceptos: “Cuando hablo de herejía, lo hago utilizando su significado en varios niveles; como una reorganización de lo establecido en las instituciones artísticas que a partir del mestizaje, como cuestionamiento de una doctrina oficial (cualquiera, no sólo la religiosa), y como una profanación deliberada de la representación tradicional”.
Todos estos niveles, envuelven una intencionalidad en la continuación de los componentes originales, -lo divino y lo profano, lo real y lo irreal, la academia y el autodidacta, lo humano y la exterioridad- pero amalgamados en dualidades que resultan en algo ajeno a lo que hasta ese momento era lo normal.
Las piezas de Daniel son fuertes en apariencia pero profundas en contenido, las gamas son nostálgicas pero muy actuales, su obra es impredecible, es una sorpresa cada trazo que el espectador va descubriendo en la imagen, el color trasgrede una intención subterránea y confunde con la perfección de la técnica.
Fusiones de cuerpos. Miradas lánguidas y nada inocentes, siempre conservan una pulcritud en el lienzo, las piezas parecen tener un recorrido inminente hacia la destrucción, un ciclo que no termina, una evolución del inicio al fin, un círculo que se está cerrando y de pronto, estalla.
Ajeno, distinto e incluso contradictorio.
Y es la contradicción, lo que no debería ser y sin embargo es, el punto de partida para crear un bestiario de seres deformes que surgen desde ámbitos como la sexualidad, la jerarquía social, o la administración de la espiritualidad, donde el desacuerdo con la normalidad oficial, produce un hereje.
La pintura que usted no debería ver
Cuando Julio Gómez de la Serna traduce Los Cantos de Maldoror sabe, según su hermano Ramón confiesa en la introducción a esta primera versión al castellano del conocido texto de Isidore Ducasse, que el bienaventurado descanso de su alma se halla en juego. A pesar de esta amenaza, decide asumir el riesgo de la propia condena y ofrecer a los lectores y lectoras la posibilidad de que éstos también puedan perder su celeste eternidad dejándose atrapar por las pústulas lingüísticas que exhala el texto maldoroniano, un auténtico y desbordado contratexto en el que lo horrible, lo sucio y lo blasfemo asumen el valor una de una nueva categoría estética.
Con posteridad a Ducasse será otro joven y no menos insolente y atrevido poeta, Rimbaud, el primero que, tras haber sentado a la belleza sobre sus rodillas, se vanaglorie de las injurias y vilipendios lanzados contra la misma. Desde entonces la hermosura, ese valor estético que nuestra lengua italianiza a través de un término como el de belleza, dejará de ser uno de los objetivos prioritarios del arte y pasará a convertirse, no sin cierta dosis de paradoja, en uno de los ingredientes menos recomendables dentro de la nueva cocina de lo monstruoso que empezará a extenderse de forma epidémica a lo largo de todo el Siglo XIX.
Este ámbito de lo siniestro que se vinculará en algunas de sus manifestaciones con lo irónico y burlesco, generará un tipo de decir en el que lo terrible y esperpéntico, se entroncará con lo visionario.
De este modo, desde Blake y Goya a Buñuel pasando por Valle Inclán o el David Lynch de Eraserhead, nos adentramos paulatinamente en un universo en el que lo ácido se hermana con lo grotesco, lo mísero con lo alucinado y lo indecible con lo cotidiano.
Éste y no otro es el mundo en el que Daniel R. Gordillo asienta sus referencias, un mundo en el que la tradición de lo oscuro se solapa con la luminosidad de lo siniestro. Debido a ello, la suya es una pintura que sólo se desenvuelve con fluidez en ese terreno pantanoso e inseguro dominado por la hibridación delirante de un discurso opaco. Seres siniestros y personajes ambiguos se encuentran destinados a establecer los confusos parámetros de una sexualidad pervertida en la que la naturaleza obra prodigios en desmesura y en la que lo real muestra las sinrazones de su precario orden.
Una vez más nos hallamos con un decir desconfiado en lo concerniente al alcance de lo humano. Un decir que se sabe incapaz de articular un saber seguro y orgulloso de sí mismo. De ahí que frente a la afirmación positiva de lo racional, esta pintura nos sumerja en un espacio donde la pesadilla se sospecha vigilia y el despertar, un mero precipitarse en una desazonadora y enervante irrealidad.
Quienes piensen que el arte aporta algún tipo de conocimiento podrán descubrir aquí las insuficiencias y limitaciones de ese saber. Bajo los adoquines de un conocer que otrora pretendió ser emancipador, no se puede ya entrever playa alguna, tan sólo nos es dado escuchar el sombrío rumor de unos desagües de los que prácticamente ignoramos todo. Tanto su procedencia, como su destino. Algo similar, por otro lado, a lo que les sucede a los seres que Daniel R. Gordillo nos muestra. Unos seres que en su esperpéntico deambular actúan como espejos de una realidad incierta.
Fuente: David Pérez catedrático de la Facultad de Bellas Artes, Valencia, España.
Individuales, colectivas y performance
Daniel R. Gordillo nació en Torreón, Coah., el 15 de agosto de 1979. Inició sus estudios plásticos en 1998 en la Escuela de Artes Plásticas de la Universidad de Guanajuato, México, y de febrero de 2002 a la fecha, en la Facultad de Bellas Artes de San Carlos, en la Universidad Politécnica de Valencia, España.
Exposiciones individuales
2003
Daniel R. Gordillo, Obra Reciente, Obra de Siempre, CaRevolta, Valencia, España.
De Carne, Dioses y Parásitos Sexuales, Galería Kitsch International, Valencia, España.
2001
El Fruto de la Paranoia, Icocult, Torreón, Coah.
2000
Del Ego a la Enfermedad, Galería El Atrio, Guanajuato, Gto.
Imágenes del 99, Tecnológico de Monterrey, Campus Laguna, Torreón, Coah.
Exposiciones colectivas
2003
Rojo Azul Amarillo, Sala de Exposiciones del Rectorado de la Universidad Politécnica de Valencia, España.
Soy Totalmente Tianguis, Sala Polivalente de la Universidad de Guanajuato, Gto.
2002
3 Filas 13 Butacas, Auditorio de Torrent, España.
2001
Muerte en Cartelera, Guanajuato, Gto.
Prensados, Museo Iconográfico del Quijote, Guanajuato, Gto.
2000
Muerte en Cartelera, Guanajuato, Gto.
Homenaje Póstumo a Francisco Luján, Alhóndiga de Granaditas, Guanajuato, Gto.
Performance Individual
2003
Acción Sonora Comiendo Periódicos, Encuentro de arte de Acción, Barrio del Carmen, Valencia, España.
Puto Barquito, IV Festival de Performance, Escuela de Bellas Artes de San Carlos, Valencia, España.
Canicas Cowboy, Galería del Palau, Valencia, España.
Acción Poética con Canicas, Sala de Exposiciones de Picanya, España.
Puto Barquito, Escuela de Bellas Artes de Porto, Portugal.
Carrera, Escuela de Bellas Artes de Porto, Portugal.
Canicas y Agua, Escuela de Bellas Artes de Porto, Portugal.
Concierto para Globos, Escuela de Bellas Artes de Porto, Portugal.
2002
Carrusel, Sombrero Vaquero y Voz dentro de un Vaso, La Sala Naranja, Valencia, España.
Concierto para Cuatro Serruchos, Sala Color Elefante, Valencia, España.
Antropozoo, III Festival de Performance, Escuela de Bellas Artes de San Carlos, Valencia, España.
Animales Muertos I: Pollo, III Festival de Performance, Escuela de Bellas Artes de San Carlos, Valencia, España.
2001
Animales Muertos I: Pollo, Curso de Acción Poética por el maestro Roberto de la Torre, en la Escuela de Artes Plásticas de la Universidad de Guanajuato, Gto., México.
Acción: Cortar Madera, VIII Festival Internacional Callejón del Ruido, Guanajuato, Gto., México.
2000
Soy Normal, Escuela de Artes Plásticas de la Universidad de Guanajuato, México.
Performance del Grupo “Los Ejecutistas”.
2001
Línea Blanca: Intervenciones Electrodomésticas, Semana Cultural de la Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Guanajuato, Gto., México.
2000
El Foco ha Muerto, (Acción Individual) cuatro acciones en el Festival Kilómetro del Arte, Centro Cultural Los Arquitos, Aguascalientes, Ags., México.
Perfor-Marce, Escuela de Artes Plásticas de la Universidad de Guanajuato, Gto., México.
Aislamiento I, Café Los Monjes, Guanajuato, Gto., México.
Acciones, VII Festival Internacional Callejón del Ruido, Guanajuato, Gto., México.
Publicaciones
-En Medio, opinión y crítica. Torreón, Coahuila.
-Pasta Seca, letras y gráfica. Guanajuato, Gto.
-Vulture, Cultura Eléctrica, No. 15, junio 2004, Valencia, España.