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San Diego, EU.- El gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, desconoció un presunto acuerdo verbal para aprobar la Ley de licencias para indocumentados, a una semana de que termine sesiones el Congreso local, que debate la iniciativa.
Schwarzenegger revocó en noviembre de 2003 la anterior Ley, que desde enero de 2004 autorizaría licencias a más de dos millones de indocumentados, en su mayoría mexicanos.
Sin embargo, el gobernador se comprometió con el autor de esa medida, el senador Gil Cedillo, a convertir en Ley una siguiente iniciativa que tuviera más medidas de seguridad sobre antecedentes de indocumentados.
Antes de revocar la Ley, Cedillo afirmó que el gobernador le había dado su palabra para aprobar una nueva iniciativa sobre este tema.
Pero, nueve meses y dos días después, y a una semana de vencer el plazo, Schwarzenegger dijo desconocer por qué el senador demócrata declaró que había dado su palabra.
“No tengo idea por qué él (Cedillo) dijo esas cosas, porque no reflejan la conversación que tuve con él”, afirmó Schwarzenegger en declaraciones televisadas ayer en San Diego.
El senador Cedillo confirmó que cuando Schwarzengger le dijo en noviembre pasado que tendría que revocar la Ley anterior, “le pregunté que si lo poníamos por escrito y me dijo que no, que me daba su palabra”.
El presidente de la bancada latina y del Comité de Relaciones con México en la asamblea de California, Marco Antonio Firebaugh, aseguró en mayo de este año que el
Gobernador había confirmado su compromiso de aprobar la Ley.
Las declaraciones de Firebaugh se dieron luego de su reunión con Schwarzenegger en la que hablaron sobre el tema de un boicot estatal en demanda de las licencias. El presidente de la Cámara Baja, la asamblea de California, Fabián Núñez, informó en junio pasado que Schwarzenegger reiteró el compromiso que contrajo con Cedilo de aprobar las licencias para indocumentados.
Un dirigente de la organización Licencias para Todos en San Diego, Gustavo Munguia, dijo a Notimex que el gobernador Schwarzenegger “gana tiempo con esas declaraciones”.
“Por un lado la presión popular que apoya las licencias es muy fuerte y para el gobernador aprobar la Ley no es gran cosa, pero por otra parte de la fracción más conservadora de su partido (Republicano) también lo presiona porque es año electoral”, opinó.
Munguía agregó que cuando Schwarzenegger declara que nunca dio su palabra, se aleja de Cedillo y la propuesta, sin comprometerse tampoco con los republicanos conservadores.
