El esquema de comercialización del frijol debe revisarse y hacer una evaluación, ya que no está cumpliendo con los objetivos debido a que las empresas encargadas del acopio y comercialización no cuentan con la estructura suficiente.
Lo anterior fue manifestado por Gustavo Pedro Cortez, dirigente de la Organización de Defensa Campesina ?Plan de Ayala?, filial al Partido del Trabajo, al reconocer que es necesario que se realice una evaluación ya que el esquema aún no se ha consolidado.
Señaló que la empresa ICOSIN no ha abierto todas las bodegas, no está cumpliendo con los compromisos; además, no cuenta con la estructura suficiente, y hasta el momento no la ha creado, situación que provoca dificultad en el acopio de la leguminosa.
Además, la empresa Semillas Selectas de Durango carece de soporte financiero e infraestructura, lo que está provocando que esté actuando como ?coyote?; no opera con el esquema respecto de las especies de los claros y pintos.
Aunado a esto siguen prevaleciendo los ?coyotes?, ya que el dirigente de la ODC considera que operan detrás de estas empresas, siendo de los más beneficiados respecto del esquema de comercialización del frijol.
Debido a esto Gustavo Pedro Cortez considera necesaria y convoca a la realización de una reunión con las autoridades y productores para evaluar el esquema y tomar medidas para posteriormente hacer los ajustes pertinentes.
La empresa ICOSIN, debido a que carece de soporte financiero e infraestructura, opera con sociedades de productores locales; inclusive, varios de sus compradores son ?coyotes?, manifestó al considerar que el esquema de comercialización del frijol no está cumpliendo con los objetivos plantados.
ESQUEMA
Endurecen normas
El dirigente de la Organización de Defensa Campesina (ODC), Gustavo Pedro Cortez, señaló que debido a que Almer y las empresas encargadas del acopio y comercialización han apretado mucho las normas de operación acrecentando la burocracia al momento de realizar los trámites, los ?coyotes? están siendo beneficiados.
Contrario a lo que se esperaba, de abatir a los ?coyotes?, los productores se están viendo obligados a venderles el frijol de campo a un precio de cuatro pesos con 70 centavos, ya que al tratar de cumplir con las normas de las empresas se incrementan los gastos de producción, provocando que les resulte más caro trasladarlo que venderlo a ese costo.
Señaló que, aunado a esto, los productores que optan por cubrir los requisitos que exigen las empresas para el acopio y comercialización de la leguminosa se tienen que esperar hasta ocho días para que les sean pagadas las toneladas comercializadas.
