EL SIGLO DE TORREÓN
Gómez Palacio, Dgo.- El Gobierno Federal cuando no actúa con torpeza, actúa con rudeza. La falta de oficio político del presidente Fox ha impedido el desarrollo del país y los acuerdos necesarios para salir adelante, pues hay muchos problemas que no se han enfrentado de manera adecuada, asegura el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido de la Revolución Democrática, (PRD) Leonel Godoy Rangel.
En entrevista exclusiva, el dirigente perredista destaca entre los grandes problemas nacionales el desempleo, la falta de desarrollo económico, la creciente emigración hacia Estados Unidos y la incapacidad para enfrentar la grave situación económica y política del país.
“Creo que se puede resumir en una expresión: falta de oficio político”, dice el líder del partido del sol azteca y agrega: “El oficio político se requiere para operar bien y para eso es necesaria la experiencia, la tolerancia, sensibilidad social y entender que se requiere mucha paciencia y reunir a los actores políticos para buscar acuerdos”.
Respecto al enfrentamiento actual entre el Gobierno capitalino y el Federal, Godoy Rangel asegura que Fox se asustó “al ver que Andrés Manuel López Obrador estuviera tan arriba en las encuestas”, lo cual lo ha orillado a tomar decisiones políticas equivocadas. “Fue un error tras otro. Al final del día se enfrentaron a una situación política que ellos no esperaban, la posibilidad de que un candidato de un partido de izquierda pudiera acceder al poder”.
¿Y la PGR tiene qué ver en esto?
-Creo que la última carta que están jugando es inhabilitar por la vía legal a quien encabeza las encuestas.
Más tarde, en rueda de prensa, el dirigente perredista en relación a un posible encuentro con el presidente Fox, dijo que “para bailar se requieren dos”.
—Hace dos semanas estuvimos caminando en el sentido correcto para entablar el diálogo, pero todo se vino abajo con las declaraciones del Presidente en Hungría y a pesar de eso nos volvimos a mostrar a favor del diálogo, pero lo ocurrido el lunes, con la decisión política de querer descalificar a quien encabeza las encuestas, no puede ser otro más que un motivo político.