EL SIGLO DE TORREÓN
CIUDAD LERDO, DGO.- La Dirección de Seguridad Pública Municipal no vigila adecuadamente en el parque Raymundo. Personas ingiriendo bebidas embriagantes, adultos orinando en la vía pública y algunos niños “nadando” en el río Nazas fueron algunas de las irregularidades que se pudieron detectar en este lugar, donde no había ni un solo policía preventivo.
El Siglo de Torreón realizó un recorrido por Raymundo para constatar las condiciones generales del paseo público, ahí se pudo apreciar que aunque hay una gran cantidad de botes de basura, los paseantes prefieren colgar en los árboles las bolsas de la basura y nunca falta el perro callejero que en busca de alimentos rompe estas bolsas regando los desechos.
También se pudo apreciar que los paseantes no respetan los señalamientos que se encuentran en las orillas del río, pues aunque se recomienda que no se introduzcan al agua, algunos padres de familia le ponen el ejemplo a sus hijos y hacen gala de sus “habilidades” como nadadores, además permiten que sus hijos pequeños se refresquen en el agua del Nazas sin tomar en cuenta el riesgo que esto representa.
Durante el recorrido se pudo apreciar que los futbolistas prefieren buscar un árbol para hacer sus necesidades fisiológicas antes que pagar los dos pesos que se cobran de cuota de recuperación en los baños públicos.
Pedro Monreal Aguilar, empleado municipal, asignado a la vigilancia de los sanitarios dice que los futbolistas nunca utilizan el baño, “cuando el vigilante los ve los regaña, pero no quieren pagar, prefieren buscar un arbolito”.
También se pudo apreciar que los sanitarios se encuentran en malas condiciones, al menos el de los hombres, el área de regaderas es utilizada para orinar porque los mingitorios originales fueron retirados, además en las paredes faltan muchos mosaicos y uno que otro pandillero ha deja el clásico “graffiti”, el tanque de agua de los sanitarios está averiado y el vigilante tiene que utilizar una tina cada vez que un paseante utiliza este servicio.
En días pasados, el director de Seguridad Pública Municipal, Antonio de los Santos Ortiz, anunció que se implementaría un operativo para evitar que los paseantes ingieran bebidas embriagantes en este paseo, por lo visto el día de ayer estas acciones no han iniciado, las familias y los equipos de futbol llegan con sus hieleras llenas de cerveza.
Alrededor de las 11:30 horas una familia llega al paseo público, los niños corren emocionados al río, el abuelo los detiene, “miren qué inconscientes, por qué dejan que los niños se metan al agua”, dice mientras señala a varias personas que se encuentran sentadas en un tronco dentro del Nazas. ¿Por qué abuelito?, pregunta uno de los niños, “es que aquí se ha muerto mucha gente”, dice el anciano.
Minutos después este abuelo que criticó la inconciencia de las personas que se aventuran a nadar en el río, toma de la mano a uno de sus nietos y se retira un poco del lugar donde acampó la familia.
Llega hasta un puente hecho con las ramas de un árbol, se baja el cierre del pantalón y orina hacía el río sin importar que varias jovencitas se dirijan a ese lugar, su nieto intenta hacer lo mismo pero al ver a las adolescentes se avergüenza y sale corriendo hacía su mamá, mientras tanto el anciano sigue como si nada hubiera pasado.
Irregularidades
Durante un recorrido por Raymundo se pudieron detectar algunas irregularidades, a continuación se enlistan algunos de los problemas:
· Los paseantes no utilizan los botes de basura y provocan que los desechos sean regados por los perros callejeros.
· Algunas personas prefieren hacer sus necesidades fisiológicas al aire libre, con tal de no pagar los dos pesos que cobran en los sanitarios públicos.
· Otros paseantes ingieren bebidas embriagantes en este paseo, cuando se supone que esto está prohibido para evitar accidentes fatales, además en este municipio es Ley seca.
· Varias personas se arriesgan a nadar en el río y permiten que sus hijos hagan lo mismo.
· Los sanitarios se encuentran en mal estado, no hay mingitorios, los tanques de agua están averiados y se tiene que recurrir al clásico tinazo, además faltan mosaicos y los “graffiteros” dejan su marca en este lugar.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón
