Todos acumulan experiencia y sabiduría, apunta el cardenal Juan Sandoval Íñiguez..
28 de agosto de 2004
Guadalajara, (Notimex).- Al celebrarse hoy el Día del Anciano, el cardenal Juan Sandoval Íñiguez señaló que las personas de la tercera edad han recibido de Dios el favor especial de una vida larga, lo que les proporciona una acumulación de experiencia y sabiduría.
En la Palabra del Pastor del Semanario arquidiocesano, el cardenal resaltó que la ancianidad es la acumulación de experiencia y sabiduría, más allá de cualquier título universitario; quien ha vivido mucho puede ser fuente importante de consejos, pues ha conocido situaciones que otros apenas van experimentando.
Refirió que en la Sagrada Escritura se considera que llegar a la ancianidad es un don de Nuestro Señor, el más preciado de todos, a pesar de los sufrimientos, limitaciones, enfermedades, y ocasionalmente, olvidos que trae consigo la vejez.
En la antigüedad, países como Israel, los tenían como consejeres: Personas capaces de orientar a los gobernantes y al pueblo, como cita el gran filósofo Platón, en su libro La República, recordó Sandoval Iñiguez, arzobispo de Guadalajara.
Destacó que pueblos que han sabido organizarse tienen como legisladores en sus Cámaras, a la gente mayor en edad y experiencia: Por eso, no es de extrañar que en países tan complicados como el nuestro, donde jóvenes de 25 ó 28 años pretenden legislar las cosas resulten como todos conocemos.
El anciano generalmente es una persona ameritada: Formó una familia, se esforzó por mantenerla, sirvió a una institución o trabajó en bien de la sociedad; todas éstas son razones más que suficientes para apreciarlo más allá de celebrarlo un solo día y no rodearlo de respeto permanente, añadió.