Busca Bush mejorar la capacidad para encontrar, perseguir y frenar a los terroristas.
27 de agosto 2004.
Washington (EU).-En medio de un acalorado debate sobre reformas a los servicios de inteligencia en un año electoral, el presidente George W. Bush se aprestaba el viernes a firmar una orden destinada a fortalecer los poderes del director de la Agencia Central de Inteligencia y otra para establecer un nuevo centro de combate al terrorismo.
Las acciones "mejorarán nuestra capacidad de encontrar, perseguir y frenar a terroristas", dijo el secretario de prensa de la Casa Blanca, Scott McClellan.
Una de las órdenes ejecutivas dará al director de la CIA autoridad adicional de manera interina para realizar muchas de las funciones de un director nacional de inteligencia tal como lo propuso la comisión encargada de investigar los atentados del 11 de septiembre, y varios legisladores. Ese director se encargará de supervisar las 15 agencias nacionales de inteligencia de Estados Unidos.
Bush también trabajará con el Congreso para crear el cargo de director nacional de inteligencia, dijo McClellan.
Admite Bush "errores" tras invasión a Irak
En entrevista para el The New York Times, el Presidente estadounidense dice que la inestabilidad en aquel país se debió a la rápida organización de militares
Acepta errores
El presidente estadounidense George Bush reconoció por primera vez que cometió "errores de cálculo" al no prever las condiciones que habrían en Irak tras la invasión, pero estimó que la inestabilidad es resultado de la "rápida victoria".
En la primera entrevista de su mandato al diario The New York Times, Bush dijo que la resistencia de grupos iraquíes, tras deponer a Saddam Hussein, derivó de la rápida organización de miembros del ejército iraquí, que huyeron por la llegada de tropas estadounidenses a su país.
Bush rehusó profundizar en el tema de la invasión y reconstrucción en Irak, y dejó claro que, como su padre el ex mandatario George Bush, "resistirá ir al sofá para repensar las decisiones" que ha tomado.
Unos mil estadounidenses murieron en la invasión y posterior ocupación en Irak y más de 10 mil civiles iraquies ha perecido a causa de la guerra, indicaron cifras del Pentágono y de la organización "Iraquibodycount.com".
La nota que da cuenta de la entrevista tiene un tono crítico, y evidencia en varios momentos el desconocimiento de Bush sobre varios de los temas inquiridos por dos reporteros del periódico.
Cuando le preguntaron sobre un reporte que dos miembros de su gabinete entregaron al Congreso esta semana, en el que su gobierno cambia de postura sobre una serie de asuntos ambientales, Bush respondió: "ah, ¿cambiamos de posición? No lo creo".
Durante todo su mandato el gobierno de Bush cuestionó la veracidad del argumento sobre las causas del calentamiento de la Tierra, en parte para justificar su decisión de no cumplir con reglas internacionales de recorte de emisión de gases tóxicos.
El reporte firmado por sus secretarios de Energía y de Comercio, retira el cuestionamiento y deja en claro que las causas del fenómeno son las que desde hace años han expuesto los científicos.
En una aparente contradicción con sus propias decisiones y el historial previo de su gobierno, Bush indicó que no favorece la idea de "establecer fechas" o ultimátums "a dictadores",
Ello en referencia al por qué no ha presionado a Corea del Norte o a Irán para deshacerse de armas de destrucción masiva. Bush dio un ultimátum de 48 horas a Hussein, antes de lanzar la invasión militar unilateral en la primavera boreal de 2003.
La entrevista tuvo lugar en Nuevo México, donde Bush realizó una escala de su campaña proselitista y a unos días del inicio de la Convención Nacional del Partido Republicano, que tendrá lugar en esta ciudad, donde el New York Times es el diario favorito.
"La entrevista tuvo lugar en un lugar inusual, en el interior de un vestidor equipado con una mesa y sillas reclinables de piel, al que sólo se accede caminando a través de un baño de hombres debajo de un estadio", en el poblado de Farmington, indicó el rotativo.