17 de febrero de 2004.
SANTIAGO DE CHILE, (AP).- Luego de dos días de reuniones de sus vicecancilleres, Chile y Bolivia lograron un par de acuerdos sobre temas fronterizos, pero dejaron para más adelante otros asuntos que los separan y no trataron la renovada demanda boliviana de un acceso al mar.
El vicecanciller de Bolivia, Jorge Gumucio, recordó que la demanda marítima sigue siendo prioritaria, pero se abstuvo de plantearla en esta XII reunión del mecanismo de consultas políticas bilateral.
"En cuanto a la postulación boliviana de resolver su tema del enclaustramiento marítimo, sigue siendo el tema número uno de la cancillería boliviana, y se tratará en los niveles y las instancias correspondientes... que oportunamente se buscarán".
Su contraparte, Cristián Barros, había advertido que Chile está dispuesto a conversar con Bolivia sobre su acceso al mar, pero "no sobre un acceso soberano al mar".
Bolivia perdió su territorio marítimo en una guerra en 1879 y siempre ha demandado recuperar su acceso al Pacífico. Chile afirma que los tratados son inmodificables y el Tratado de Paz y Amistad de 1904 estableció las fronteras definitivas.
Gumucio y Barros firmaron un acuerdo sobre controles fronterizos integrados y otro sobre intercambio de información aduanera.
Entre los temas que quedaron para más adelante están el de la licitación del puerto de Arica y el uso de las aguas del Silala, que serán discutidos entre marzo y abril, en La Paz.
Bolivia afirma que la licitación de Arica implicará un incumplimiento del Tratado de 1904, que obliga a Chile a otorgarle un régimen de libre tránsito y acceso a todos los puertos chilenos. Chile afirma que se tratará de una administración civil, que por contrato debe incluir el respeto del libre tránsito y mercaderías.
"En la medida que estamos explorando todavía la situación de Arica, no vemos necesario volver a la OEA en circunstancias que estamos trabajando con Chile en este tema", declaró Gumucio, en relación a una declaración en ese sentido del canciller Juan Siles.
Gumucio aprovechó el ambiente distendido para dar seguridades a la selección chilena de fútbol que en marzo debe jugar en La Paz un encuentro por las eliminatorias del mundial del 2006.
"En marzo esperamos a la selección chilena, les vamos a dar todas las garantías y la hinchada de Las Paz siempre ha sido muy educada, de modo que va a haber un trato justo al equipo chileno cuando juegue en La Paz".
El ambiente de tensión entre Chile y Bolivia, reconocido por el propio canciller Siles, llevó a algunos a especular que pondrían tener algún problema de parte de la hinchada boliviana.
El reclamo marítimo boliviano fue motivo de un debate público entre los presidentes Ricardo Lagos, de Chile, y Carlos Mesa, de Bolivia, durante la última cumbre presidencial, en Monterrey, México.
