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PASADENA, EU.- Horas después de haber terminado su viaje de casi siete años hasta llegar a la órbita de Saturno, la nave espacial Cassini envió ayer sus primeras fotos a la Tierra, las cuales mostraron ondas de energía y los bordes nítidos de los enormes anillos del planeta.
Estas primeras fotos en blanco y negro, tomadas desde la parte iluminada de los anillos y estaban plagadas de “ruidos” electrónicos.
Sin embargo, son lo suficientemente claras como para poder distinguir la fina estructura de los anillos y bordes más nítidos de lo esperado, si se tiene en cuenta el hecho de que todas las partículas en los anillos chocan constantemente unas con otras.
“Los científicos que estudian los anillos adoran los bordes nítidos. Son muy misteriosos. Debe haber algún mecanismo que los mantiene definidos”, dijo Carolyn Porco, jefe del equipo científico encargado de las imágenes de Cassini.
Los científicos se mostraron encantados con la claridad y cantidad de imágenes recibidas, ya que éstas son las fotos más cercanas que se harán de los anillos durante la misión.
“Estas imágenes son más o menos fortuitas”, expresó Porco. Las fotos también muestran “ondas de densidad”, que son alteraciones en las partículas presentes en los anillos causadas por la energía de satélites naturales que pasan por las afueras. Según los científicos, esto se puede comparar con los patrones de estrechamiento y ensanchamiento en las congestiones de tráfico.
Científicos de la NASA, el organismo espacial de Estados Unidos y otros centros espaciales internacionales recibieron las fotos con júbilo y las calificaron de “hermosas” y “sorprendentes”.
“Son tan buenas que parecen falsas, pero no lo son”, dijo Porco desde el Laboratorio de Propulsión a Chorro en Pasadena, California.
La nave espacial, del tamaño de un camión, se deslizó el miércoles por la noche a través de los anillos y entró en la órbita de Saturno, después de recorrer 3,500 millones de kilómetros desde su lanzamiento en octubre de 1997.
En su trayecto, la nave aprovechó la gravedad de la Tierra, Venus y Júpiter para desplazarse hacia Saturno, el sexto planeta del sistema solar.
Cassini pasará alrededor de cuatro años estudiando al planeta, sus anillos y algunas de sus 31 lunas conocidas, pero en especial la mayor de todas, Titán, una de las más misteriosas en nuestro sistema solar, con una atmósfera y composición que ha inspirado sueños sobre el posible nacimiento de un sitio donde se podría vivir.
Cassini transporta a un pequeño explorador, el Huygens, diseñado para separarse de la nave a finales de diciembre y lanzarse hacia la superficie de Titán para realizar un breve estudio de la atmósfera de esa luna de Saturno, que está compuesta principalmente por metano y nitrógeno.
Gran parte de la misión del Huygens fue diseñada por organismos espaciales de Italia y otras naciones de Europa.
De hecho, la misión de tres mil millones de dólares ha sido elogiada como un modelo de cooperación internacional en la que han participado científicos de 17 países.
La misión se ha desarrollado sin contratiempos desde su lanzamiento hasta la inserción en la órbita de Saturno.
Caminata peligrosa
Dos astronautas de la Estación Espacial (ISS) iniciaron la madrugada de ayer el paseo espacial que tuvieron que suspender la semana pasada a los pocos minutos de su salida de la estación debido a una fuga de oxígeno en uno de los trajes. El comandante ruso Guennady Padalka y el especialista estadounidense Edward Fincke, los dos únicos habitantes de la ISS, salieron la madrugada de ayer para cambiar una pieza eléctrica de un giróscopo que impide desde abril su correcto funcionamiento, una maniobra que no había terminado al cierre de esta edición.
El paseo espacial ha sido minuciosamente preparado por los centros de control de Estados Unidos y de Rusia debido a que los astronautas utilizan trajes espaciales rusos. Además, se considera una salida más arriesgada de lo normal por el hecho de que no queda nadie en el interior de la estación que pueda reaccionar ante una emergencia.
La estación tiene ya sólo dos giróscopos en funcionamiento y si dejara de funcionar uno de ellos sin haber recuperado otro sería necesario orientarla mediante el encendido periódico de alguno de los motores de las naves atracadas permanentemente en ella.