La frecuencia de los ?apagones? en el servicio de electricidad, aun cuando sean de menos de un minuto de duración, está relacionada con las tormentas eléctricas y fuertes vientos que acompañan a las precipitaciones pluviales, y que provocan que los sistemas automáticos interrumpan el fluido cuando se presenten factores externos con riesgo de daño para el sistema, como caída de ramas que entrelazan los cables.
Se trata de medidas preventivas automatizadas que de no aplicarse implicarían desperfectos mayores a las redes de transmisión y distribución de energía eléctrica en Durango, y por ende suspensiones de mayor tiempo al servicio en las zonas donde estén los circuitos afectados.
Al ser cuestionado sobre las suspensiones que registra el servicio de energía eléctrica, según las quejas de la población, el gerente de la Comisión Federal de Electricidad, Juan Antonio Castaños Villarreal, argumentó la influencia de las condiciones climatológicas en ello, con la aclaración que de no aplicarse las acciones de mantenimiento preventivo, las repercusiones negativas serían de mayor magnitud.
Explicó que cuando se suscitan las lluvias asociadas con fuertes vientos y tormentas eléctricas, se sensibilizan los sistemas automáticos y se disparan los interruptores, sobre todo cuando se presentan factores externos como las ramas de los árboles, la misma agua, o que los cables se entrelazan.
Pero aclaró que cuando se trata del sistema automático, el suministro de electricidad se suspende cuando mucho un minuto. En caso de que sobrepase tal tiempo, entonces significa que sí se presentaron daños en los circuitos, y requiere que las brigadas de la CFE acudan físicamente a realizar un recorrido para encontrar el deterioro y actuar en consecuencia.
Puso por ejemplo que el martes por el bulevar Francisco Villa, frente a un centro comercial, un poste que concentra a dos circuitos estuvo a punto de caer, por lo que requirió de maniobras para reparar los daños. Ello duró aproximadamente siete horas, mismo tiempo que se suspendió el servicio en la zona.
E insistió en que cuando no hay daños, y los interruptores se disparan automáticamente solamente en previsión de irregularidades, el ?apagón? no debe durar más del minuto. La frecuencia de tales suspensiones dependerá de la magnitud de las tormentas pluviales, eléctricas y los vientos.
FRACCIONAMIENTO
Ajuste de equipo
Con relación a las quejas de los vecinos del fraccionamiento Nuevo Durango, sobre la suspensión frecuente del servicio de electricidad, el Gerente de la CFE argumentó que posiblemente se deba al ajuste normal de los equipos de suministro del fluido, que son de reciente instalación.
Admitió la responsabilidad de la paraestatal en la prestación del servicio en el mencionado centro habitacional, y enfatizó que gradualmente habrá de disminuir la frecuencia de los ?apagones? así como el tiempo de duración, en función del ajuste del sistema.
El fraccionamiento Nuevo Durango no se ha municipalizado, por lo que aún son responsabilidad de la empresa constructora los servicios urbanísticos básicos, como el de alumbrado y limpia, informaron funcionarios municipales e integrantes del Ayuntamiento.
