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MÉXICO, DF.- El comediante Freddy Ortega, "La Jitomata?, informó que ya se siente mejor, ya que en la función de gala de 100 representaciones de la obra El Tenorio Cómico, sintió mareos y con una sensación de asfixia, debido a la baja de glucosa en la sangre que sufrió.
En entrevista, el actor explicó que luego de la función del jueves "me costó trabajo respirar y me sentí mareado, pero no pasó a mayores. Me voy a hacer unos chequeos generales, a petición de los médicos que me atendieron".
Aseguró que todo esto se debe al exceso de trabajo, al estrés, a la mala alimentación y a problemas para conciliar el sueño, porque "no puedo dormir fácilmente; vengo de una gira intensa, no descanso como debiera". Ortega comentó que ayer por la mañana tuvo un ligero desvanecimiento por una baja de azúcar en la sangre, justo cuando conducía sobre el Anillo Periférico, sensación que se le volvió a presentar durante la función del El Tenorio Cómico.
"Nadie venía conmigo en el carro y le hablé a mi novia y le dije: háblame, no me dejes de hablar, porque me siento muy mal. Fue cuando sentí cómo se me nublaba la vista y me orillé como pude" y enseguida acudió con un médico para que lo atendiera.
Ante la posibilidad de un reemplazo en la obra en la que participa, más bien dijo "estoy pensando en cuidarme más y darme un descanso de por lo menos tres días. Ahora el trabajo está cargado con los Mascabrothers y vamos a reducir nuestra gira, ya lo hablamos Luis Ernesto Cano y mi hermano Germán".
El comediante mencionó que buscan un espacio para darse un descanso, pero sin descuidar el trabajo. Confió en que este malestar "no sea diabetes, porque mi madre lo padece".
Respecto al éxito de la obra El Tenorio Cómico, Freddy manifestó sentirse muy contento de trabajar al lado de personajes como Sergio Basáñez, Daniel Bisogno, René Franco y Ana LaSalvia, junto con sus compañeros Luis Ernesto Cano y Germán Ortega.
Agradeció el apoyo y la presencia de la productora de novelas Carla Estrada y los productores de la obra "El tenorio cómico", Reynaldo López y Alejandro Gou, así como el tiempo y la paciencia del director Manuel "Flaco" Ibáñez.
