EFE
KINSHASA, CONGO.- Una serie de ataques armados fueron lanzados la madrugada de ayer contra lugares estratégicos de la capital de la República Democrática de Congo (RDC), Kinshasa, en lo que ha sido calificada de una intentona golpista.
Los grupos armados lanzaron ataques infructuosos contra la sede de una emisora privada de televisión y contra al menos dos bases militares en Kinshasa, afirmó el Ministro de Información.
Al menos un soldado murió y dos fueron heridos en los enfrentamientos armados, anunció el ministro del departamento, Vital Kamerhe, ante las cámaras de la televisión estatal.
El ministro hizo sus declaraciones para explicar los disparos de morteros y armas ligeras que se oyeron en la capital ayer por la madrugada y que continuaron hasta bien entrado el día.
Kamerhe aseguró que “la situación está bajo control e insto a la gente a mantener la calma”.
El presidente de la RDC, Joseph Kabila, fue evacuado de su residencia, frente al río Congo y cerca de la zona de los enfrentamientos, según dijo una fuente de la Presidencia que pidió el anonimato.
Según testigos, la infiltración de “elementos rebeldes” empezó en la noche del sábado para estallar los primeros tiroteos alrededor de las 03:30 hora local cuando un grupo armado entró en el mayor cuartel de Kinshasa, “Campo Kokolo”.
Otro cuartel, el de Tshatshi, fue también atacado, afirmaron habitantes de la zona, que sostuvieron además que los atacantes tuvieron “apoyo local”.
Al mismo tiempo fueron atacados la base naval sobre el río Congo y otros cuarteles, al igual que las instalaciones del aeropuerto militar de Ndolo, situado en el casco urbano de la capital congoleña y cuyas instalaciones utiliza actualmente la Misión de la ONU en el Congo (Monuc).
El ministro Kamerhe aseguró que las fuerzas gubernamentales lograron capturar varios de los supuestos golpistas.
Fuentes contactadas sostuvieron que en los tiroteos de ayer en Kinshasa, especialmente en la ocupación por los supuestos golpistas del arsenal situado en el Campo Kolkolo, hubo “al menos unos cincuenta muertos y 16 capturados”.
La RDC, tercer país africano por extensión, está saliendo de una guerra civil que duró cinco años y en la que, según la ONU, murieron unos tres millones de personas.
El ministro Celestin Munene, ex jefe del Estado Mayor de las FFAA, dijo que los asaltantes atacaron también la cárcel de alta seguridad en la que se encuentran presos los condenados a muerte por el asesinato en enero de 2001 del entonces presidente Laurent Desire Kabila, padre del líder actual, Joseph.
Todo apunta a que el ataque fue lanzado desde Brazzaville, justo al otro lado del río, según una fuente de la Presidencia de la RDC, que señaló que uno de los objetivos de los ataques fue la base naval en Kinshasa.
No se descarta que el ataque fuera lanzado por antiguos partidarios de Mobutu Sese Seke, el dictador que fue derrocado en 1997 por Laurent Desiré Kabila, el padre del actual presidente.