Fue un juego sin complicaciones y en el que no se advirtió un mínimo de equivalencias de fuerzas entre uno y otro equipo.
11 de agosto 2004.
Patras (Grecia), (EFE).- La selección argentina de fútbol sacudió hoy a la de Serbia y Montenegro con una goleada (6-0) y justificó con amplitud su condición de máxima candidata al oro de los Juegos de Atenas.
Los argentinos ganaban por 4-0 al terminar la primera parte y completaron la faena a media máquina y sin complicaciones en unos poco atractivos 45 minutos finales, en los que no se advirtió un mínimo de equivalencias de fuerzas entre uno y otro equipo.
Fiel al estilo que lo llevó a la final de la reciente Copa América disputada en Perú, el conjunto albiceleste descargó sobre un improvisado rival una andanada ofensiva que dio frutos desde los 11 minutos, cuando César Delgado abrió el marcador con un tanto de su exclusiva producción.
El equipo de Vladimir Petrovic, superado en todo el campo, no tuvo posibilidades de reaccionar y a los 17 sufrió la segunda caída de su portería con un gol del Kily González, que conectó frente al meta Milojevic un pase en profundidad lanzado por D'Alessandro.
Argentina rompió fácilmente el endeble bloqueo de su rival en la zona media, se movilizó en ese sector con una velocidad demoledora y afianzó su superioridad en la brillantez de Carlos Tevez como creativo y realizador.
En un alarde de recursos técnicos y contundencia el jugador del Boca Juniors amplió la ventaja a tres con un remate que depositó el balón junto a un palo y a cuatro al coronar antes de irse al descanso una combinación suya con Delgado con un toque fino, preciso, entre el portero rival y un defensa descontrolado.
Serbia y Montenegro, equipo que llegó a Atenas apenas con los jugadores necesarios para salir al campo a causa de una lucha de intereses entre los clubes de su país y la selección que le ha afectado notoriamente, pagó caro esa situación de emergencia y no pudo hacer nada para evitar la goleada.
En la segunda parte los argentinos bajaron el ritmo y perdieron profundidad, aunque en todo momento mantuvieron el balón en su poder mientras que los jugadores balcánicos, lejos de aspirar a una recuperación en el marcador, intentaron mantener el orden para impedir una goleada mayor.
El quinto tanto del equipo que dirige Marcelo Bielsa fue marcado a la salida de un córner con un certero toque de cabeza hacia atrás del defensa Gabriel Heinze, a los 73 minutos. Poco después, a los 75, Mauro Rosales elevó la ventaja a la media docena con una jugada en velocidad que minó la escasa resistencia que ofrecía la formación europea.
La selección argentina dio muestras hoy de un gran poderío y de que cuenta con recursos individuales y colectivos que pueden ponerle a tiro del oro olímpico que jamás logró. Su próximo paso será enfrentase a Túnez y después se las verá con Australia en Atenas.
6. Argentina: Lux, Ayala, Heinze, Coloccini, Luis González, Mascherano, Kily González (m.76, Clemente Rodríguez), D'Alessandro (m.60, Saviola), Tevez (m.72, Nico Medina), Rosales y Delgado.
0. Serbia y Montenegro: Milojevic, Neziri, Stepanov, Jokic, Basa, Lomic, Milovanovic, Malic (m.69, Petrovic), Vuksevic, Delibasic (m.81, Nikezic) y Radonjic (m.46, Krasic).
Goles: 1-0, m.11: Delgado. 2-0, m.17: Kily González. 3-0, m.42: Tevez. 4-0, m.43: Tevez. 5-0, m.73: Heinze. 6-0, mm.75: Rosales.
Árbitro: Carlos Batres (GUA). Amonestó a Matic (m.6), D'Alessandro (m.45).
Incidencias: Partido del grupo D del torneo masculino de fútbol de los Juegos Olímpicos disputado en el estadio Pampeloponesiacó de Patras ante unos ocho mil espectadores.